Los hermanos de la Hermandad de Nuestro Padres Jesús a la Entrada en Jerusalén y María Santísima de la Estrella han tenido que renunciar a salir en procesión este Domingo de Ramos a causa de la fuerte amenaza de lluvia existente a las 17.00 horas, momento de su salida, una previsión de precipitaciones que posteriormente se cumplió, convirtiendo en acertada la decisión de la junta de gobierno.
De este modo, los miembros de la cofradía llevaron a cabo los actos del Domingo de Ramos en el interior de la parroquia de San Isidro Labrador. A pesar de la frustración, se lo tomaron con mucha filosofía y, ante todo, con la responsabilidad de preservar las imágenes por su valor patrimonial y artístico.