En el Campo de Gibraltar existen muchas entidades centradas en la ayuda a diversas discapacidades, las cuales realizan iniciativas para recaudar fondos y así poder prestar una mejor atención a sus socios. Una de ellas es Apropadis, quien usa la cultura y la lectura como vehículo para este fin.
Con origen en Algeciras, Apropadis 2.0 tiene su sede en la calle Juan Morrison de Algeciras, en un local que ocupan desde hace un par de años. A primera vista, más que una asociación, parece una librería, ya que hay muchos volúmenes en la puerta que anuncian la posibilidad de adquirirlos por módicos precios.
En su interior, además de cientos de libros de segunda mano de todos los géneros, está su oficina. José Manuel Corrales es su presidente y recuerda con mucho cariño el "proceso lento y cambiante" que le ha permitido a la entidad ir creciendo hasta, incluso, tener un local para ellos solos. "Fue un hito en nuestra trayectoria", destaca.
La iniciativa de los libros solidarios permite que, a cambio de un donativo que no supera los cinco euros, en función de la obra y su estado de conservación, todo aquel que lo desee pueda colaborar fácilmente a que Apropadis pueda atender a sus socios, que se distribuyen principalmente entre Algeciras y La Línea, pese a que tiene ámbito provincial. "Es una fuente financiera y que nos aporta visibilidad", expone.
Corrales también valora la importancia de sus asociados y voluntarios, especialmente al no tratarse de una entidad de las más grandes y reconocidas. "Existen otras más pequeñas de la ciudad que hacemos un trabajo humilde pero constante", reivindica. También recuerda que buena parte de los servicios que prestan dependen de las fuentes de financiación, en su mayoría públicas, aunque también se incluyen algunas privadas como la Fundación Cepsa, que ha reconocido en varias ocasiones sus iniciativas.
La asociación, que se fundó en 2013, realiza más iniciativas aparte de la más visible. "Somos mucho más que libros", recuerda con simpatía Nilaida Hoggstraten, trabajadora social de Apropadis. Ella coordina uno de los proyectos, que es el de atención y asesoramiento sobre conceptos de discapacidad y trámites como la ley de dependencia, aunque se realizan otros como actividades de ocio accesibles para sus socios, que se mueven en su mayoría en silla de ruedas, o la fisioterapia sostenible.
Otro de los fines de Apropadis es fomentar la inclusión social de las personas con discapacidad, especialmente enfocado en los más pequeños. Para ello impulsan unos cuentacuentos infantiles en los que reinterpretan cuentos clásicos incluyendo conceptos de discapacidad, uniendo a niños con y sin la misma. Hoggstraten recuerda con mucho cariño al grupo autodenominado 'la tribu', formado por varios de los asociados más pequeños de la entidad que, impulsados por sus familias, buscan actividades inclusivas que realizan cada mes juntos.
"Poco a poco Apropadis va creciendo, no solo en libros, sino también en actividades y demandas que intentamos atender", resalta orgullosa Nilaida Hoggstraten.