El Gobierno de Gibraltar ha invitado a sus ciudadanos a utilizar "el sentido común" tras las "especulaciones en las redes sociales" sobre personas supuestamente multadas en España por no contar con un sello de entrada [a España] en su pasaporte, las cuales "no deberían utilizarse"", según Gibraltar, "con fines partidistas internos en Gibraltar. Se trata de una cuestión muy delicada y quienes ocupan puestos de responsabilidad deben actuar con cautela y moderación en sus comentarios públicos sobre el tema".
Esto se debe a que sigue siendo un requisito legal que cualquier titular de un pasaporte del Reino Unido, independientemente del color de su tarjeta de identidad expedida en Gibraltar, reciba un sello cuando entre en el espacio Schengen y otro cuando salga de él. Esa disposición jurídica no ha cambiado, recurerdan desde el Peñón.
Además, recuerdan, ningún ciudadano británico, incluidos los gibraltareños, necesita visado para entrar en el espacio Schengen para estancias de hasta 90 días en cualquier período de 180 días. Los pasaportes deben sellarse precisamente para determinar si el titular ha respetado esas condiciones. Esta norma no es exclusiva para Gibraltar, sino que se aplica a todos los ciudadanos británicos, independientemente del punto de entrada en España o, de hecho, en todo el espacio Schengen.
Sin embargo, puntualizan que "es cierto" que España hizo una concesión voluntaria de no sellar los pasaportes de los residentes en Gibraltar previa presentación de un documento de identidad o de una tarjeta de registro civil. Así se hacía inicialmente después de que el Reino Unido y Gibraltar abandonaran la Unión Europea. Pero, en octubre de 2021, cambió la disposición para los ciudadanos británicos residentes en Gibraltar, tras la introducción de nuevos procedimientos de inmigración en el propio Reino Unido para la entrada de ciudadanos de la UE, incluidos los españoles. Tanto el Gobierno del Reino Unido como el de Gibraltar han hecho público que han tratado el asunto con las autoridades españolas en varias ocasiones para conseguir una prórroga para los titulares de la tarjeta azul [británicos no gibraltareños residentes en Gibraltar]. Lamentablemente, a pesar de estos esfuerzos, que incluyeron plantear el asunto en diferentes ocasiones a nivel oficial y político, no ha sido posible conseguir que Madrid cambie de política.
Por lo tanto, desde el gobierno gibraltareño quieren dejar claro que "el alcance, la amplitud y la duración de esta concesión dependen enteramente de España, que es quien la otorga unilateralmente".
Mientras tanto, la no necesidad de un sello ha seguido en vigor "únicamente para los titulares de la tarjeta de identidad de color rojo [que identifica a gibraltareños]". Gracias a esto, recuerdan, "Gibraltar ha estado protegido de los peores efectos de un Brexit duro en la frontera. Es poco agradecido y generoso no reconocer este importante hecho".
También consideran pertinente señalar que "cuando se trata de concesiones voluntarias de este tipo, no plasmadas en la ley, su aplicación, por su propia naturaleza, no puede ser impepinable".
El Gobierno puede confirmar que "aún no tiene conocimiento"de la identidad de ningún titular de tarjeta roja "que haya sido multado por encontrarse en España sin sello de entrada", ni "tiene conocimiento" de "dónde exactamente se afirma que tuvo lugar este incidente". Tampoco se le ha notificado "ningún cambio" en esta política unilateral por parte de las autoridades españolas mientras continúen las negociaciones del tratado.
Dicho esto, señalan que "es importante que las personas que se beneficien de esta concesión actúen con cierta discreción y sentido común para evitar cualquier trastorno en su viaje a España". Consideran, a este respecto, "lógico" que c"uanto más alejados estén de la frontera, menos conozcan esta concesión discrecional los funcionarios encargados del cumplimiento de la ley y otras personas". Dado que se trata de una medida puente voluntaria y no escrita, "lamentablemente no es posible ser más preciso", puntualizan desde el ejecutivo gibraltareño.