El colectivo Ascteg de trabajadores españoles en Gibraltar ha manifestado su queja por la protesta convocada para este viernes por el sindicato Unite The Union que afecta a la agencia de guardias fronteras y costas por los efectos que puede estar provocando en la frontera entre La Línea y Gibraltar.
Desde Ascteg, que forma parte, junto con la propia Unite, del denominado Grupo Transfronterizo, que engloba a colectivos sociales, de índole económica, sindicatos, etc. a ambos lados de la Verja, se muestran mokestos porque "hace muchos años que acordamos no utilizar nunca la frontera de La Línea y Gibraltar para reivindicaciones laborales o sociales, protestas ni manifestaciones que impidiesen la libre circulación ya de por sí deteriorada por el problema de soberanía". En otras palabras, señalan que "la frontera es sagrada" y que "se respeta el derecho de todos para cruzarla".
Ante todo, Ascteg quiere dejar claro que respeta "el derecho de cada trabajador a realizar protestas, algo que siempre hemos apoyado y a cada trabajador", pero que, sin embargo, "pensamos que UnitetheUnion no ha valorado el impacto y esta vez va a cometer un grave error cuyas consecuencias podrían dispararse y ser desastrosas y no sólo mañana -por hoy- sino teniendo en cuenta que detrás de esta protesta que implica paralización o demorar será seguida por Acerinox (y llevamos unos dudad intentando hacer razonar) y nadie podrá impedir que cada vez más empresas, trabajadores y a quiebra de la gana incluso políticos utilicen la frontera para su propósito cuando lo que busquen sea la publicidad con el resultado de la vuelta de las largs colas que pueden de nuevo hacer que ir de un lugar a otro sea una pesadilla como las colas de Margallo".
Destacan que hay más de 16.000 trabajadores que "tendrán dificultades para llegar a trabajar y a partir del lunes no sabemos y sus empresas y los comercios también lo sufrirán sin que sean responsables de que los trabajadores en huelga no tengan sus derechos cubiertos".
"Como ASCTEG también somos parte del Grupo Transfronterizo miembro con derecho a opinar como UNITE, lamentamos que no nos hayan pedido nuestra opinión ni nos hayan informado con anticipación considerando que la frontera es de dos lados", lamentan.
También temen que eso sirva "para ser utilizado por políticos de derecha que, evidentemente, no harán ningún ventaja a nadie ni a las buenas relaciones".
"Realmente esperamos que antes de que las cosas empeoren, Unite reconsidere la situación, ya que incluso los frágiles acuerdos GIB-SPA-RU-UE pueden verse dañados por mucho tiempo o lamentarismos que eternamente para siempre", finaliza Ascteg.
