El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, ha señalado que hay "indicios claros" que llevan a pensar que los tres detenidos en Ciudad Real por su vinculación con Al Qaeda "podían estar planeado un atentado en España y/o en otros países".
Se trata de dos ciudadanos rusos --uno de ellos checheno-- "extremadamente peligrosos" con conocimiento en el uso de veneno y fabricación de coches bomba. Uno de ellos está considerado "un operativo muy importante" dentro de la franquicia terrorista.
En la rueda de prensa posterior a una operación que ha destacado como una de las más relevantes realizada contra Al Qaeda en Europa, Fernández Díaz ha añadido que el grupo estaba formado también por una tercera persona de nacionalidad turca que actuaba como facilitador del grupo.
Contaban con un chalet adosado en la localidad de La Línea, concretamente en la calle Virgen de Loreto, en la barriada de Mirasierra. En ese lugar la Policía ha encontrado una cantidad de explosivo que, en palabras del ministro, sería suficiente para hacer volar un autobús y que "sería especialmente lesivo si se le añadiese metralla".