Unos diez vecinos, entre ellos varios menores, han tenido que ser evacuados en la madrugada de este martes de sus tres viviendas en la calle San Silvestre de Guzmán, sita en la barriada del Almendral de Cartaya, como consecuencia de un incendio que ha calcinado sus porches exteriores.
Los hechos han tenido lugar pasadas las dos de la madrugada cuando, por causas que aún se desconocen, las llamas prendieron los tres porches, arrasando todo el mobiliario que encontraron a su paso. Una hora más tarde se logró apagar el incendio, en cuyas labores intervinieron, según los propios afectados, tres unidades de bomberos del Consorcio Provincial contra Incendio, desplazadas desde Villablanca. Al lugar también se desplazaron una patrulla de la Policía Local de Cartaya y varias de la Guardia Civil.
No obstante, y según la información facilitada a VIVA por algunos de los afectados, la colaboración vecinal fue “clave” para evitar desgracias personales, ya que “desde el primer momento todos se organizaron para apoyar las labores de extinción, sobre todo en los primeros momentos y antes de que llegasen los bomberos, con cubos de agua, mangueras y todo lo que encontraron a mano”.
Según los mismos afectados, la evacuación, llevada a cabo por sus propios medios, con la ayuda de los vecinos, fue “muy complicada y aparatosa” al no poder salir de sus viviendas por la puerta principal por encontrarse los porches en llamas. Una circunstancia que los obligó a saltar las tapias de los patios interiores para lograr ponerse a salvo tanto de las llamas, como del intenso humo que en pocos minutos se acumuló en el interior de las viviendas.
Finalmente tan solo tuvo que ser atendido por los servicios sanitarios del centro de salud de Cartaya uno de los vecinos afectados, un joven que sufrió quemaduras leves en una de las manos, pero que sobre todo presentó problemas respiratorios como consecuencias de la inhalación de humo, y que fue dado de alta poco después.
Los daños materiales han sido cuantiosos, ya que al mobiliario que se encontraba en el momento del siniestro en los porches y que ha quedado completamente arrasado directamente por las llamas, se unen los desperfectos producidos por el humo en el interior de las viviendas, así como la rotura de cristales, escayolas y recubrimientos de paredes motivados por el intenso calor.
También ha resultado afectado uno de los vehículos que en esos momentos estaban estacionados en las puertas de las tres viviendas, ya que el resto pudo ser retirado por los vecinos, en algunos casos arrastrados y levantados a la fuerza por ellos mismos, desplazándolos a lejos de las llamas.
Los vecinos afectados han confesado a VIVA que llegaron a sentir “pánico”, sobre todo por la “imposibilidad” de poder salir por las puertas principales de sus viviendas. Y es que algunos aseguran que “no ha ocurrido una desgracia mayor por cuestión de minutos”.