El Hospital Regional Universitario de Málaga ha adquirido un nuevo robot quirúrgico Da Vinci, que incorpora tecnología avanzada para la realización de intervenciones quirúrgicas mínimamente invasivas, lo que aporta una mayor seguridad y precisión y que facilita más la recuperación de los pacientes. Sustituye al equipo con el que contaba desde 2007 --el que inició la cirugía robótica la sanidad pública andaluza-- y realizará más de 140 operaciones al año.
La consejera de Salud, Marina Álvarez, ha presentado este viernes el nuevo 'Da Vinci', que se ubica en el Hospital Civil y, posteriormente, se ha reunido con profesionales de Urología, Cirugía General y Ginecología que trabajan con él en quirófano.
La consejera, que ha destacado la apuesta por la cirugía robótica en la sanidad pública andaluza, ha estado acompañada por la delegada de Igualdad, Salud y Políticas Sociales, Ana Isabel González, así como el director gerente del Hospital Regional, Emiliano Nuevo, el director médico, Miguel Ángel Prieto, el director de enfermería, Cipriano Viñas, además de los responsables de Urología, Emilio García Galisteo, Cirugía General, Julio Santoyo y Ginecología, Jesús Jiménez.
También han acudido la supervisora de quirófanos, Pilar Jiménez, la responsable de la Unidad de Endometriosis del centro, la también ginecóloga Emilia Villegas, y el responsable de la Unidad de Coloproctología, el cirujano Santiago Mera.
La nueva adquisición, que supone una inversión de 2,5 millones de euros, incorpora mejoras respecto al robot con el que contaba el hospital hasta el pasado mayo, mes en que se incorporó el nuevo.
Además de realizar incisiones más pequeñas, requerir de un menor uso de anestesias, producir una menor pérdida de sangre y de reducir el tiempo de recuperación y postoperatorio con estancias hospitalarias más cortas, el nuevo Da Vinci incorpora la posibilidad de añadir la fluorescencia en quirófano, es decir, emplear sustancias que resaltan las estructuras linfáticas.
La fluorescencia facilita la disección y radicalidad en cirugías oncológicas en cáncer de próstata y de útero y, en este último caso, permitirá detectar el ganglio centinela, clave para el diagnóstico del mismo. Gracias a esta posibilidad se podrán identificar estructuras de más difícil localización, lo que permite una actuación más severa sobre los tumores y una mayor seguridad en las zonas cercanas al mismo.
Otra de las mejoras que suma es la posibilidad de hacer cirugía de puerto único, solo una entrada para el material, lo que reduce las cicatrices, y el acoplamiento del carro de paciente con sistema láser, hasta ahora era manual, lo que hace que el procedimiento sea más rápido y fiable.
Además de las mejoras asistenciales, esta herramienta facilita el trabajo a la enfermería, puesto que mejora el acoplamiento, parte fundamental de las intervenciones. A los cirujanos también les supondrá un salto en la calidad a la hora de intervenir al paciente, porque gracias al intercambio de la cámara podrán tener otra visión en aquellos de especial complejidad.
En casos de intervenciones en las que el campo operatorio es más amplio, como las hemicolectomías --cirugía de colon-- ofrecerá mayor comodidad postural al cirujano.
Aunque está previsto aumentar la cartera de servicios del Da Vinci en los próximos años, en la actualidad este robot de última tecnología es utilizado por tres unidades del Hospital Regional.
El 60 por ciento de las intervenciones son hechas por los urólogos, que hacen, fundamentalmente, dos tipos de intervenciones: prostatectomía radical --cáncer de próstata-- y pieloplastia, es decir, la estrechez de la unión pieloureteral.
La UGC de Cirugía General, que en el futuro podrá hacer cirugía de páncreas, realiza en la actualidad intervenciones para cáncer de recto, mientras que Ginecología hace descenso de suelo pélvico y trata endometriosis, además de actuar en cáncer de útero y de endometrio y cérvix.
El urólogo y especialista en intervenciones con Da Vinci, Emilio García Galisteo, ha afirmado que la finalidad de este robot es llevar a cabo la intervención con la misma seguridad y éxito que a través de laparoscopia o cirugía convencional.
"La ventaja es que al tener una imagen tridimensional y disponer de instrumentos articulados la exactitud a la hora de extirpar estructuras, respetando las adyacentes, es mayor por lo que la disección realizada alrededor del órgano que pretendemos extirpar es menor, lo que conlleva un menor dolor, una recuperación más rápida y un menor sangrado", ha explicado el cirujano.
También ha relatado que, al tener mejor visión e instrumentos articulados se pueden conservar estructuras nerviosas y del esfínter mejor, lo que repercute en una recuperación de las posibles secuelas de manera más precoz y con mayores tasas de éxito.
"Para el sistema sanitario público es muy importante contar con la última tecnología médica, en este caso quirúrgica, donde se está demostrando diariamente en la clínica y en diferentes publicaciones y reuniones médicas que los resultados funcionales en urología, como es continencia y tasa de recuperación de la erección son mayores y más precoces que las obtenidas con cirugía abierta y con cirugía laparoscópica", ha agregado García Galisteo.
Por parte de Ginecología, la cirujana y coordinadora de la Unidad de Endometriosis Profunda del Hospital Regional de Málaga, Emilia Villegas, ha señalado que el nuevo Da Vinci "es más rápido para la ejecución y las fuentes de marcaje de las cadenas ganglionares con fluorescencia mejorarán la seguridad y la efectividad de la cirugía".
El responsable de la Unidad de Coloproctología, Santiago Mera, señala que el nuevo robot supone "una mayor eficacia oncológica y más seguridad clínica para el paciente al aumentar la precisión quirúrgica sobre áreas delicadas o de difícil acceso".
Además, apunta a que al disponer de sellador de vasos o endograpadoras, "se pueden alcanzar áreas hasta ahora inaccesibles para la laparoscopia convencional, por lo que se pueden completar intervenciones de cáncer de recto con gran precisión quirúrgica y oncológica, minimizando las pérdidas sanguíneas", ha apuntado.
La nueva adquisición permitirá, asimismo, abordar intervenciones que hasta ahora se hacían de forma convencional. Se trata de las nefrectomías parciales --cirugía de riñón-- y cistectomías --de vejiga--.
Además, la Dirección del hospital tiene previsto formar nuevos equipos en los próximos meses con la intención de aumentar la carga de trabajo del Da Vinci, lo que en la práctica podría suponer un incremento de intervenciones superior al 30 por ciento. Actualmente, son siete los profesionales formados para el uso del robot, aunque a lo largo de 2019 se incorporarán dos urólogos más que aún se están formando.