Al menos 10 indígenas murieron, una decena resultaron heridos y varios se encuentran desaparecidos o atrapados tras la erupción del volcán Nevado del Huila en la noche del jueves, confirmaron ayer fuentes oficiales.
El ministro de Interior y Justicia, Fabio Valencia, dijo a los periodistas que hasta el momento hay constancia de “diez personas muertas” y que no han podido establecer “si hay otras situaciones dolorosas”.
Las autoridades no han podido llegar a las partes más altas del volcán, porque el mal tiempo ha impedido que los helicópteros con ayudas lleguen y las carreteras fueron destruidas por las fuertes avalanchas que se produjeron en el momento de la erupción.
El coordinador de la Cruz Roja Colombiana en el municipio de Inzá, Orlando Marulanda, subrayó que “la situación es realmente incierta, existe la información de que hay unas víctimas y hemos tratado de coordinarnos con los organismos de socorro de Paéz y no hay información concreta porque ellos no han podido acceder a la zona por mal tiempo”, añadió.
Las autoridades civiles señalaron que unas 150 personas están atrapadas en la parte alta del cañón de un río y tampoco han podido ser evacuadas por el mal tiempo.
La erupción del volcán Nevado del Huila formó un cráter de unos 400 metros de diámetro en uno de los picos de esa cumbre del suroeste colombiano.