¿Qué sería de este Betis si no existiese Rubén Castro?. Una pregunta para muchos de sencilla contestación y al mismo tiempo, de enorme resignación explícita en la misma.
Él y sólo él, se ha encargado de mantener al conjunto verdiblanco un año más en Primera División (a expensas de una sorpresa matemática mayúscula) y evitar otra debacle institucional y deportiva.
Hasta el minuto 81 tuvo que esperar el beticismo asistente en el Benito Villamarín para ver casi certificada la permanencia del equipo de las trece barras, gracias una vez más, al acierto innato de su máxima estrella a día de hoy. Con el del sábado. ya son 17 goles los que ostenta el canario.
Pues pese a sus 34 años, para Rubén Castro, como con el buen vino, la experiencia y su olfato ante la meta rival, ya le han colocado en las páginas doradas de los anales del Betis como un verdadero héroe.
Triunfo del filial ante la Balompédica Linense (4-1)
Juanma, Fabián, Loren y José Carlos le otorgaron tres puntos de los pupilos de José Juan Romero muy importantes en la Ciudad Deportiva Luis del Sol que le sitúan con 30 puntos, a 5 del FC Jumilla, equipo que a día de hoy marca la salvación en el Grupo IV de Segunda División B.
