No hay tiempo para disfrutar de los triunfos ni para lamentarse de las derrotas, el fútbol no descansa.
El equipo amarillo aparca la Copa del Rey y ya prepara su próximo partido, esta vez de liga y ante un rival que ha comenzado como un tiro.
Los de Álvaro Cervera se medirán al Numancia el domingo, a las 20.00 en el Ramón de Carranza.
Los sorianos lideran la tabla de Segunda División, eso sí, empatados con otros tres equipos, entre ellos el Cádiz.
Con diez puntos ambos encabezan la categoría junto a Valladolid y Cultural Leonesa, que curiosamente se midieron anoche en la Copa con goleada pucelana (0-4).
También disputó esta competición el Numancia, que necesitó prórroga y tanda de penaltis para dejar fuera al Sporting de Gijón, aunque las rotaciones le salven del cansancio extra.
Este comienzo numantino de la temporada casi perfecto, al igual que el cadista, hace esperar un gran partido. De momento, el Cádiz prepara a conciencia el encuentro y entrenará hoy y mañana a puerta cerrada en El Rosal.
Las buenas noticias llegan desde una enfermería que se va vaciando y los lesionados leves van entrando en el trabajo normal del grupo. Alberto Perea, que aún no ha podido debutar, continúa poniéndose en forma tras superar una apendicitis durante la pretemporada. Por su parte, Rubén Cruz ha dejado atrás una rotura de fibras.
En cambio, preocupan las lesiones de larga duración de Sankaré y José Mari. Y preocupa también el extremo Álvaro García, fuera de combate por un golpe de Eddy Silvestre recibido en el partido ante el Nàstic de Tarragona. Estos tres futbolistas realizan ejercicios de recuperación al margen del grupo.