La pandemia de la COVID-19 obligó inicialmente al aplazamiento del torneo, previsto entre el 10 y el 20 de diciembre
El Mundial de Clubes que se iba a disputar en diciembre se jugará finalmente del 1 al 11 de febrero de 2021 en Catar, informó este martes la FIFA en un comunicado.
La pandemia de la COVID-19 obligó inicialmente al aplazamiento del torneo, previsto entre el 10 y el 20 de diciembre, que definitivamente se disputará en dichas fechas de febrero bajo las medidas marcadas dentro del protocolo de partidos internacionales de la FIFA para proteger la salud y garantizar la seguridad de los participantes.
Por el momento tenían plaza garantizada el Bayern Múnich como campeón de Europa y el Al-Duhail catarí, y quedaban por conocerse los representantes de Sudamérica, Concacaf, Asia, África y Oceanía. Se trata de la última edición con el formato actual.
El 'Bureau' del Consejo de la FIFA también decidió que los mundiales femeninos sub'20 y sub'17 no se jueguen en 2021 y pasen a disputarse en los países previstos, Costa Rica e India, respectivamente, en 2022.
Tras decidir el aplazamiento de ambos torneos hasta principios de 2021, la FIFA consultó a todos las partes implicadas, incluidas las federaciones anfitrionas, participantes y confederaciones, para hacer un seguimiento de la situación provocada por la pandemia.
"En concreto, para estar al tanto de sus posibles efectos en el bienestar general y la seguridad de las jugadoras y participantes de los diferentes rangos de edad", precisa la FIFA, que apunta que "partiendo del enfoque de la salud y la seguridad son lo primero, los grupos de interés han planteado importantes dudas con respecto a la celebración de los torneos juveniles programados para 2020" por cuestiones como el tiempo de preparación de los equipos y los obstáculos que genera la propia pandemia para acabar los torneos clasificatorios.
Por lo tanto, el grupo de trabajo de la FIFA y las confederaciones sobre la COVID-19 recomendaron cancelar las ediciones de 2020 de ambos torneos juveniles femeninos y ofrecer los derechos para albergarlos en 2022 a los países anfitriones inicialmente previstos para las competiciones de 2020.
La FIFA muestra "su agradecimiento a las federaciones miembro anfitrionas, así como a las autoridades de estos países por su compromiso con los torneos y por los preparativos llevados a cabo hasta la fecha", y espera seguir colaborando con ellos "para que los torneos sean todo un éxito.
"La FIFA, junto a las federaciones miembro anfitrionas, las confederaciones y los grupos de interés clave, continuará vigilando la evolución global de la pandemia, así como el posible impacto que esta pudiera tener en los preparativos y la celebración de los próximos torneos", concluye.