Sin noticias, sin respuestas y sin que nadie explique motivo alguno, el José del Cuvillo sigue cerrado para sonrojo de unos y preocupación de otros. Lo que tras el acuerdo sellado, firmado y acordado semana atrás debía ser el comienzo de una nueva etapa y el inicio de un escenario diferente, lejos de la realidad, todo sigue igual que entonces. O peor, según se mire, porque el tiempo pasa sin que varíe la situación.
Lo que se daba por cerrado, continúa sin obtener la avenencia que se pretendía conseguir. El acuerdo, las declaraciones, las intenciones, las respuestas, las acusaciones y lo que es peor en la actualidad, el silencio se impone día tras día como única vía de actuación. Es el manual de cabecera: callar y esperar.
Aunque eso sí, nadie sabe a qué, por qué y para qué esa tardanza y esa ausencia de respuesta ante un problema con el que se ha venido negociando con más o menos acercamiento, tras el cierre con un auto judicial de por medio, incluido.
Cada parte defiende su postura con argumentos. Jugadores, instalaciones, documentos, leyes, convenios y demás burocracia, que lejos de solucionar, alargan ante la omisión y nula respuesta que se viene ofreciendo en el tiempo, ante una solución que debiera encontrar una mayor celeridad y una mayor efectividad de la que se viene ofreciendo hasta la fecha.
Cierto que los tiempos en los que se debe moverse el Recreativo Portuense no son los mismos, también. Como que tampoco, más de un mes después y dos semanas tras el anuncio del acuerdo, aún no se haya acogido al entendimiento definitivo por todas las partes.
Las comunicaciones carentes de respuesta con las que desde el club han reiterado una tras otra en su intento de conseguir el poder reanudar su actividad en el recinto de Valdelagrana, no ha conseguido con éxito la confirmación de volver al Cuvillo.
El nuevo rol con el que debe ajustarse el club es bien sabido y aceptado por estos, que han reiterado su compromiso a abonar y amoldarse a la nueva realidad. El desplante con el que se le viene tratando a la entidad, responde a los movimientos y declaraciones en los que no han gustado ni al Ayuntamiento ni a la propia Concursal.
La frialdad con la que se viene llevando los escasos encuentros mantenidos, del mismo modo, tampoco han ayudado a un entendimiento y a un desbloqueo que se alarga en el tiempo. Como que al Recre tampoco le beneficia la coyuntura económica del resto de entidades deportivas.
Cuvillo, sí; pero gratis
El escaso interés mostrado por el resto de clubes de tomar el José del Cuvillo como lugar de entrenamiento y disputa de sus partidos es prácticamente nulo, dejando a éste para partidos considerados interesantes, pero para nada como una norma que se cumpla de forma periódica.
Los 25 euros por hora y la letra pequeña de no encontrar una mayor explotación que exclusivamente la disputa de los partidos, ha enfriado los ánimos iniciales de acoger sus encuentros como local.
La intención es tener un Cuvillo con actividad para mantener los gastos mínimos de mantenimiento y no como fin de “hacer negocio”, tal y como se apuntara entonces. La falta de comunicación obligará una semana más a que los equipos adapten sus encuentros como local en la Ciudad Deportiva portuense.
Diario de actuaciones
20 de octubre El club recibe un auto judicial y la taquilla es embargada.
21 de octubre Yolanda Morales acude de nuevo al estadio para reclamar las llaves del estadio.
22 de octubre El Recre solicita al Ayuntamiento mediar en el conflicto.
23 de octubre La entidad convoca a las puertas del estadio a todos los estamentos del club a realizar “un entrenamiento“.
24 de octubre Concentración en las puertas del Ayuntamiento. Enrique Moresco valora como “una verdadera tragedia para el deporte portuense y en general para el Recre" esta situación. Aunque es un “tema judicial“, reconoce que no se ha tenido “la sensibilidad humana de todos los afectados que no tienen culpa absolutamente de nada”.
25 de octubre El directivo Manuel Muñoz Miranda anuncia en la web oficial que dimite.
28 de octubre El club se cita en el Salón del Instituto Santo Domingo. Antonio Flor ante los asistentes al acto, proclama la “vuelta al Cuvillo”.
29 de octubre Segundo encuentro en el estadio con las cámaras de Andalucía Directo como testigo.
31 de octubre Este medio adelanta el principio de acuerdo conseguido ante la Concursal, tras la reunión a tres bandas celebrada en Jerez, previo pago de un canon.
2 de noviembre La actividad vuelve al estadio para la acogida de los partidos de ese fin de semana.
3 de noviembre El club abre la puerta de salida a los jugadores que cobran.
4 de noviembre Del optimismo inicial ante el principio de acuerdo, la ausencia de noticias enfrían un acuerdo que se puede demorar.
6 de noviembre Todos los grupos municipales aprueban una moción para solucionar el cierre del José del Cuvillo.
7 de noviembre Los portavoces de los grupos municipales presentan una Moción con carácter de urgencia al pleno de este jueves.
8 de noviembre Decepción, prepotencia o fata de respeto, palabras utilizadas en una nota oficial del club dirigidas al Consistorio.
10 de noviembre Por primera vez en su historia, el Recreativo disputa un partido como local lejos del José del Cuvillo.
11 de noviembre Este periódico en exclusiva avanza que el acuerdo es cuestión de días.
14 de noviembre Tal y como se avanzaba días anteriores, se publica el acuerdo alcanzado.
15 de noviembre Se firma el acuerdo y en rueda de prensa sin la presencia del club, tanto Ayuntamiento como Concursal, anuncian las condiciones establecidas.
18 de noviembre Todos los clubes de fútbol de la ciudad mantienen un encuentro en la Concejalía de Deportes y conocen los acuerdos para acceder al Cuvillo.
23 de noviembre Tanto el primer equipo, como el femenino y el juvenil disputan sus partidos nuevamente en la Ciudad Deportiva
25 de noviembre El club comunica a la Concursal, en la cuenta de correo facilita al efecto, su horarios de entrenamientos como los de sus partidos de competición. Sin contestación, notifica a la Federación sus horarios para que la Ciudad Deportiva acoja sus encuentros.
27 de noviembre Nuevamente el club, insta, vía correo electrónico, sus pretensiones para utilizar y hacer uso mediante pago del estadio.