Los cientos de militantes de Podemos concentrados en la Plaza del Reina Sofía muestran una creciente decepción a medida que avanza el escrutinio electoral, mientras cada vez más militantes van llegando a la sede del PSOE, donde se respira un ambiente más animado que al principio de la noche.
El silencio y el desánimo son también la nota predominante en el teatro en el que la dirección de Unidos Podemos sigue la noche electoral cuando al 92 % de los votos escrutados se confirma que no superarán al PSOE ni en votos ni escaños, como era su objetivo.
El candidato de Unidos Podemos a la Presidencia, Pablo Iglesias, aún no ha comparecido ante los periodistas, aunque su director de campaña, Íñigo Errejon, ha admitido que los datos que se conocen de las elecciones, que confirmarían que no se produce el 'sorpasso' al PSOE, "no son unos buenos resultados" ni para la coalición ni para España, y ha reconocido que tampoco eran los que esperaban.
En la Plaza del Reina Sofía, los cientos de personas que siguen, desde una pantalla gigante con el directo de una cadena de televisión, el recuento en la plaza madrileña no quieren perder la esperanza a la espera de conocer el resultado en las grandes ciudades, donde están convencidos tendrán un mayor número de votos.
En silencio y sin ocultar su sorpresa ante la casi confirmación de que no habrá sorpasso, al menos en escaños, al PSOE, Martín, un votante de la formación morada, asegura a Efe que mucha gente mayor ha preferido en este caso devolver el voto a los socialistas.
María confiesa que ha perdido la esperanza "en un país donde el PP sigue quedando como primera fuerza", mientras que Antonio asegura estar expectante y confía en una mayoría absoluta de Podemos y PSOE.
En el Teatro Goya, desde donde los miembros del partido esperan el escrutinio final, ha cambiado en relación con el ambiente del 20D. No se escuchan aplausos ni vítores a medida que avanzan los resultados.
Sin embargo, a medida que avanza el escrutinio, los militantes y simpatizantes van llenando la sede federal del PSOE con un ánimo muy diferente al que había cuando se han publicado los primeros sondeos a pie de urna.
Las caras largas al conocer las encuestas han tornado en tranquilidad y cierta sensación de alivio.
"No es tan fácil matar al PSOE", cuenta Julián, de 71 años y que afirma que no quiere ver a Pablo Iglesias "ni en pintura".
Pese a todo, la mayoría de simpatizantes coinciden en pedir "prudencia" porque, dicen, "aún queda mucha noche".
Sin embargo, pocos creen que el sorpasso se vaya a dar finalmente y señalan que su opción de gobierno favorita es un ejecutivo formado por PP y Ciudadanos con la abstención del PSOE.
