"Un total de 64 personas -51 civiles y 13 insurgentes- han muerto en operaciones de las fuerzas afganas y de la OTAN en el distrito de Ghaziabad, en el este de Kunar", declaró a Efe el gobernador de esa provincia afgana, Fazlulá Wahidi.
Según Wahidi, entre los fallecidos hay veinte mujeres y varios niños.
En un comunicado posterior, la ISAF anunció el envío de un equipo para investigar la denuncia del gobernador, relativa a "operaciones en la provincia de los últimos días".
La ISAF informó el pasado viernes de las muertes de más de "treinta" supuestos insurgentes armados en ese distrito en bombardeos que se prolongaron durante cuatro horas durante la noche del jueves, aunque descartó la muerte de civiles.
Hoy afirmó disponer de un vídeo que muestra que en ese bombardeo murieron "36 insurgentes que llevaban armas", en un terreno muy escarpado.
Las operaciones de la ISAF continuaron hoy en la zona, donde se produjeron dos combates separados entre la fuerza armada y un número por identificar de insurgentes que se desplazaban a "posiciones de combate" en el distrito de Ghaziabad.
"Las informaciones iniciales indican que no hay bajas civiles", precisó de nuevo la organización.
Kunar es una región colindante con las áreas tribales de Pakistán y tradicional punto de trasiego de los insurgentes que atraviesan esa frontera para luchar contra las tropas internacionales.
Ghaziabad es un distrito montañoso y escasamente poblado no lejos de esa frontera, en una de las zonas donde los combates entre las tropas internacionales y los insurgentes son más virulentos.
Durante el año 2010 murieron 2.421 civiles, lo que supuso un aumento del 3,8 por ciento respecto al año anterior, según datos de la organización Afghanistan Rights Monitor (ARM).
Las organizaciones de Derechos Humanos atribuyen a los talibanes la mayoría de las muertes de civiles, mientras que las autoridades afganas, con el presidente Hamid Karzai a la cabeza han calificado de "inaceptables" las muertes civiles en bombardeos de la ISAF.