El director de los Mossos d'Esquadra, Albert Batlle, ha reclamado que se mantenga al Cuerpo de Mossos d'Esquadra al margen del debate político de cara a las elecciones catalanas del 27 de septiembre y ha afirmado: "Ni lo fomentaremos ni dejaremos que se fomente".
En una entrevista de Europa Press, Batlle ha resaltado que los Mossos son "un cuerpo policial profesional que se debe a la ley y ésta es la misión que le corresponderá".
"Estamos centrados en la misión que tenemos encomendada que es la seguridad de los ciudadanos de Cataluña. Cualquier otra consideración es distorsionar el papel que la policía debe hacer en una sociedad democrática", ha argumentado.
Sobre el papel de los Mossos si se plantea una confrontación entre dos legalidades tras el 27S, ha dicho: "Cada cosa en su momento, éste es un tema que ahora no se da, en el hipotético momento en que se pudiera dar, se tomaría la decisión que conviniera, no adelantemos acontecimientos".
Al preguntársele si los Mossos deben estar al lado de la Generalitat, se ha limitado a decir: "Cada cosa en su momento. Evidentemente los Mossos son la Policía de la Generalitat".
En el caso de que se plantee una independencia unilateral tras el 27S, ha dicho: "No avancemos acontecimientos, en todo caso es un valoración de carácter mucho más global que solo en lo referente a la policía. Si este tema hipotéticamente se plantea deberá ser analizado en el momento concreto".
SEGURIDAD NACIONAL
Al preguntársele sobre si le preocupa que el Gobierno central pueda tomar el control de los Mossos en base a la aplicación de la futura Ley de seguridad nacional, recientemente aprobada en comisión en el Congreso de los Diputados, ha afirmado que está claro que le preocupa y cree "que no se producirá en ningún caso".
"Es una preocupación por un texto legal pero la concreción legal no creo que se llegue a producir y no es deseable para nadie que se llegue a producir", ha sentenciado.
Ha valorado: "Esta es una ley excepcional y su aplicación supongo que obedecerá a razones muy excepcionales".
Sobre las consecuencias de que el Gobierno aplicara el artículo 155 de la Constitución y suspendiera la autonomía catalana, solo ha afirmado: "Al último que le corresponde opinar sobre esto es al director de la policía. Sería una animalada que el director general intervenga en este tema".
Ha asegurado que ningún mando de Mossos le ha trasladado dudas o quejas: "Ninguna, son profesionales, saben perfectamente que hay una estructura de mando y jerárquica que funciona impecablemente y que la seguridad del país está en manos de personas responsables".
Sobre si le gustaría continuar como director de Mossos tras las elecciones, ha asegurado que se siente "muy confortable" en el mando político de la policía catalana.
"Me pongo a disposición de quien constituya gobierno a partir del 27 de septiembre. Si el conseller me quiere ratificar la confianza, estaría encantado", ha explicado.