El fundador y expresidente de la empresa Mixta África, Luis Hernández de Cabanyes, ha reconocido durante su declaración como testigo en el juicio del caso Nóos que de él partió la iniciativa de contratar a Iñaki Urdangarin como consejero asesor de la compañía, afirmando que lo hizo "por su notoriedad y también por su trabajo". "Nos podía ayudar como asesor y como imagen", ha remarcado.
En su comparecencia ante el tribunal, Hernández -quien en 2007 fue sustituido por el exministro Josep Piqué al frente de la mercantil- ha recordado que fue en 2006 cuando "le hicimos la oferta y tardó algunas semanas o meses en contestar porque lo tenía que someter a consulta, no sé de la Casa Real. Dijo que sí".
El testigo ha recordado que la compañía acordó abonarle 6.000 euros mensuales en el marco de una "práctica habitual en compañías que intentan crecer y tener un asesor externo". Una cantidad que el exduque decidió facturar a través de Aizoon, empresa de la que es copropietario junto a su mujer, la Infanta Cristina.
No obstante, ha aseverado que el exduque "nunca pidió nada que no le correspondiese. Nos acompañó en algún viaje y siempre fue educado y correcto".
Los investigadores pusieron el punto de mira en esta contratación dado que Urdangarin facturó a través de Aizoon los trabajos de asesoramiento que llevó a cabo para varias firmas, entre ellas Mixta África, que en realidad tenía que haber declarado como persona física. Mediante este sistema, el marido de la Infanta acabó defraudando hasta un total de 337.138 euros en las cuotas del IRPF de 2007 y 2008.
El empresario ha explicado que Mixta África estaba construyendo viviendas económicas en el norte de África y que la intención era levantar unas 5.000. "Es cierto que después la operación de Mixta África no salió bien y perdimos dinero. Pero hubiese contratado a Urdangarin si no fuera una persona conocida y notoria, pues a lo mejor lo hubiéramos contratado para otra cosa, pero no para imagen", ha añadido.
"PAGÁBAMOS EN FUNCIÓN DE QUIEN NOS IBA A DAR SU TIEMPO Y SU IMAGEN"
Al ser preguntado sobre si había más asesores externos y si estos eran retribuidos con cantidades similares, Hernández ha señalado que "pagábamos importes de 3.000, 6.000 o 15.000 euros en función de la persona que nos iba a dar su tiempo y su imagen".
Sobre si el exduque realizó algún informe, el fundador de la empresa ha aseverado que "lo importante no era el informe, seguro que lo había y había documentación, pero no pagábamos por informes sino por gestiones, por una imagen que nos ayudase a vender las viviendas".
Asimismo, el testigo ha sido inquirido sobre el pago de 15.000 euros que la mercantil efectuó a favor del marido de la Infanta y que posteriormente canjeó por acciones en una operación presuntamente ficticia a través de Aizoon para defraudar a Hacienda, sobre lo cual el empresario ha asegurado no recordar el abono de la anterior cantidad, "pero supongo que era la cantidad por incorporación".
Hernández ha señalado que cree que el exduque adquirió acciones, si bien ha manifestado no conocer cuánto tiempo las tuvo en su poder. "Supongo que las adquiriría a través de una sociedad", ha remachado.
Mixta África abonó 341.000 euros entre 2007 y 2008 -años en los que el exduque habría defraudado a Hacienda- a Urdangarin a través de Aizoon por sus asesoramientos sobre el negocio inmobiliario en el continente africano.