El plan municipal de poda, que arrancó el pasado mes de noviembre y actuará en un total de 8.000 árboles, ha entrado en su recta final. La concejala del área de Gestión de Recursos, Pilar Fernández-Fígares, ha indicado que los trabajos comenzaron en las principales vías y avenidas, y durante las próximas semanas proseguirán por todo el término municipal.
La edil ha indicado que “es indispensable realizar una poda de mantenimiento de los árboles, que consiste en eliminar ramas secas, tocones, ramas con riesgo de rotura o ramas que estorben el paso de personas o toquen cables o edificios”. De esta manera se consigue un doble objetivo, mantener el árbol con una forma adecuada para que crezca sano y fuerte y evitar el riesgo de caída de ramas sobre la vía pública.
El plan de poda incluye también a los numerosos naranjos que adornan céntricas plazas y calles del municipio. Los operarios han limpiado los árboles de ramas secas y también han recogido los frutos que estaban en mal estado o que ya se habían caído al suelo.
La concejala de Gestión de Recursos afirmó que este plan de poda ha sido posible con la externalización de los servicios de mantenimiento de parques y jardines, ya que ahora se cuenta con más personal y maquinaria para realizar labores de mantenimiento.“Tener cuidados los árboles de la ciudad es primordial para dar una imagen cuidada y limpia de Estepona”, aseguró Fernández- Fígares.
Por otro lado, durante los tres últimos años el Ayuntamiento ha plantado en el municipio más de 6.000 árboles dentro del Plan Árbol. El objetivo de esta iniciativa es regenerar el paisaje urbano y periurbano mediante la integración de la vegetación en estos espacios. Además, se ha conseguido embellecer nuestra localidad y convertirla en un lugar más habitable y sostenible. De esta manera, la iniciativa no solo supone el embellecimiento de distintas zonas de la ciudad, sino que conlleva otros muchos beneficios como: la oxigenación de las lugares afectados, que se suavicen las temperaturas y la descontaminación.