Galicia ha elevado este lunes al Tribunal Superior de Xustiza (TSXG), como se preveía, las medidas relativas a la limitación de movilidad y al derecho de reunión tras decaer el estado de alarma después de haber estado durante seis meses en vigor.
Las medidas aprobadas por la Xunta, asesorada por el comité clínico, fijan el cierre perimetral de los municipios en máximo riesgo, cinco ahora mismo -Cambados, Cualedro, Laza, Padrón y Vilanova de Arousa-; el toque de queda entre las 23 y las 6 horas en esas localidades; y la restricción de reunión entre la 1 y las 6 en toda Galicia únicamente a personas convivientes.
Durante el resto del día el encuentro entre no convivientes se ciñe a un máximo de 4 personas en interiores y de 6 en exteriores.
Todas estas normas deben ser avaladas por el alto tribunal gallego y el pronunciamiento, según las fuentes consultadas, podría demorarse hasta mañana.
En el primer día laborable sin la alerta, el presidente gallego, Alberto Núñez Feijóo, ha insistido en declaraciones efectuadas en Oporto, donde ha participado en un diálogo con el alcalde Rui Moreira, en que la solución para luchar contra la pandemia es aprobar una nueva legislación sanitaria ya que "el Tribunal Supremo no puede ser un juzgado de guardia".
Tras trascender que el Ejecutivo sopesaría legislar sobre esta cuestión en caso de que el Tribunal Supremo no garantice las medidas dictadas por las comunidades, Núñez Feijóo ha insistido en que el TS no legisla, sino que aplica las leyes.
Mientras no haya una legislación específica habrá "lagunas e inseguridad jurídica", ha señalado Núñez Feijóo, que ha destacado que el Supremo va a tener que dirimir fallos contradictorios entre tribunales superiores autonómicos sobre medidas similares y, además, ha advertido, sus magistrados "ni son epidemiólogos ni tienen la responsabilidad de rellenar vacíos legales".
El conselleiro de Sanidad, Julio García Comesaña, ha ahondado en la misma idea al apuntar que si Galicia no consigue el aval del alto tribunal gallego pues "estudiará" recurrir al TS, el camino que ha establecido el Gobierno central, para a continuación matizar que la "judicialización" de la crisis sanitaria no les gusta, y mucho menos todavía "judicializar" al cuadrado.
El responsable del departamento autonómico ha mostrado también su preocupación, en un encuentro digital organizado por Europa Press, ante las "preocupantes aglomeraciones" vistas el fin de semana en algunos lugares, pues, aunque en Galicia no haya habido "demasiadas", ha calificado tal comportamiento de "preocupante".
El portavoz parlamentario del PPdeG, Pedro Puy, ha pedido un "esfuerzo" colectivo para evitar una nueva ola, mientras que el secretario general del PSdeG, Gonzalo Caballero, ha aconsejado cautela para poder seguir avanzando en el proceso de desescalada y ha rogado que no se "criminalice" a toda la ciudadanía por las instantáneas de multitudes que han circulado.
"Tenemos entre todos que ganar esta batalla al virus", ha ahondado, como Puy, en una rueda de prensa en el Parlamento, mientras que la dirigente nacionalista Ana Pontón insiste en la importancia de "no bajar la guardia".
Entre los profesionales sanitarios, el Colegio de Médicos de Ourense ha reivindicado en esta jornada mucho "sentido común" al recordar que no hay cifras "que indiquen suficiente control epidemiológico" y que hay ciertas actitudes que, con este panorama, resultan "descorazonadoras".
En la administración local, el alcalde de Santiago, Xosé Sánchez Bugallo, ha puesto en valor el modo de actuar en la ciudad porque "hubo menos problemas de los que cabría esperar", la regidora de A Coruña Inés Rey ha coincidido en que "no ha habido una incidencia mayor a la de otros fines de semana previos" y el primer edil de Ribadeo (Lugo), Fernando Suárez, ha reclamado "cabeza" y que continúen respetándose las normas.
Los casos activos por covid-19 en Galicia siguen a la baja y se mantienen por debajo de los tres mil, al sumar 2.984, aunque, según el último recuento, han subido los hospitalizados, tanto en unidades de críticos como en planta convencional.