En 2011, el matrimonio formado por Lourdes Tena Montaño y Crisanto González Tornero, que entonces vivían en la barriada de La Navidad fueron pillados con unos cuatro gramos de cocaína. Este delito contra la salud pública fue condenado con cuatro años de cárcel, y la sentencia fue ratificada por el Tribunal Supremo.
Ahora, pese a no tener antecedentes penales, con dos hijos menores bajo su custodia y cumpliendo con normalidad un proceso de desintoxicación en Arrabales (centro onubense de rehabilitación) han recibido el auto de prisión, y si no prospera los movimientos a contrarreloj de su abogada, entrarán el prisión este lunes 25 de mayo.
Mayte Largo, abogada de este matrimonio, relató a Viva Huelva que este martes presentó una petición de indulto ante el Ministerio del Interior, a lo que añadió la petición en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de la suspensión de la ejecución de la condena hasta que se tramite ese indulto. Fuentes jurídicas consultadas por este periódico indicaron que el Ministerio del Interior suele tardar “entre un año y un año y medio” en resolver este tipo de peticiones de indulto.
Además de este movimiento de la defensa de este matrimonio, Largo también ha anunciado la presentación de un recurso de amparo ante el Tribunal Constitucional. La abogada indica a Viva Huelva que lo que se pone en cuestión en este proceso judicial no es la sentencia en sí, ratificada como se ha dicho por el Tribunal Supremo, sino el procedimiento para la suspensión de la condena. Y es que la abogada onubense defiende que los condenados “no son delincuentes, no tienen antecedentes y hay un informe favorable del centro de rehabilitación sobre el proceso de tratamiento que están recibiendo”.
Días contados
Estos días, Crisanto y Lourdes viven en la más absoluta incertidumbre. Preparan un Rocío que no saben si podrán vivir hasta el final, ya que él pone a disposición de los peregrinos animales que tiene a su cargo. Pero está todo en el alambre, porque la resolución dictada por la Audiencia Provincial de Huelva Sección Segunda tras un auto del pasado 5 de mayo del año en curso, señala que este lunes 25 de mayo a las diez de la mañana deberán entrar en prisión. Mayte Largo valora que el documento presentado este martes “se tiene que resolver” y confía en que haya una resolución favorable para que sus clientes no entren en la cárcel y queden a la expectativa de la decisión de indulto.
El matrimonio tiene en la actualidad dos hijos menores a a su cargo, uno de 17 y otro de cinco años de edad, y ambos son totalmente dependientes de ellos, pues sólo cuentan con los ingresos del padre por un picadero de su propiedad donde tiene actualmente una treintena de bestias, entre caballos y mulos.
Pese a no haber sido pillados con una alta cantidad de droga, no tener antecedentes, tener hijos menores a su cargo y estar inmersos con los pasos correctos en un proceso de rehabilitación, la Justicia ha dictaminado que cada uno ha de cumplir cuatro años en la cárcel. Ahora, se agarran al clavo ardiendo de la petición sobre la bocina del indulto y de la suspensión de la condena para poder agarrarse a la libertad que ahora mismo pende de un hilo.