Los profesionales de restaurantes con estrella Michelín de toda España demandan alumnos de la Escuela de Hostelería Gambrinus de Jaén. Ésta es una de las pruebas del prestigio del que goza la Escuela, en la que cada año se forman un total de 30 alumnos, de entre 17 y 25 años para ser profesionales de sala y cocina.

Según el profesor de Sala Fernando Martínez, “todos los años la demanda supera a la oferta de plazas de la Escuela, quedándose fuera siempre en torno a 10 o 20 alumnos”.

La Hostelería se ha convertido en la salida laboral de muchos jienenses que desean emprender en el sector. “Buscan una formación buena y rápida y eso nos ha beneficiado como Escuela”, confirma Fernando Martínez.

Los jóvenes se forman en ambas especialidades de quincena en quincena, simultaneando sus estudios teóricos con las prácticas. De hecho, el curso acabó el pasado 20 de junio, pero los jóvenes estarán hasta septiembre en los mejores restaurantes de Madrid, Toledo, Málaga, Barcelona y Santander, la mayoría con estrella Michelín. “Los alumnos disfrutan haciendo sus prácticas en restaurantes de esta categoría y el nivel de inserción es del 100% cuando finalizan sus prácticas”, valora Fernando Martínez.

Durante el curso, los estudiantes, el 70% de ellos hombres, también realizan prácticas en restaurantes de la provincia y otras actividades 'extraescolares' que favorecen su especialización.

Sus conocimientos los ponen en práctica durante todo el año, de martes a viernes, en el restaurante de la Escuela, donde a diario reciben una media de 25 comensales, que degustan un menú elaborado por los alumnos.

Según Fernando Martínez, camareros y cocineros deben reunir ciertas cualidades para ser un buen profesional de la Hostelería. Entre otras, “han de tener muchas ganas, sentir amor por el oficio, ser humildes y tener ganas de innovar siempre en lo que hagan”.

El curso, de un año, cuesta 2.100 euros.