Y sin duda es importante y decisivo el apoyo ciudadano, que los miles de firmas entusiastas se conviertan ahora en defensa enérgica
El Ayuntamiento de Jaén ha iniciado una serie de actos para implicar a la sociedad en el objetivo de la declaración de la Catedral como Patrimonio de la Humanidad. En el bellísimo marco de la sacristía las autoridades y colectivos sociales respondieron a la convocatoria que encabezaban las corporaciones de Jaén, Úbeda y Baeza, ya que las tres ciudades se hermanan en este ambicioso proyecto por el que la Catedral pretende ser una extensión del conjunto monumental renacentista, declarado hace diez años. Vimos este acto como el inicio de la cuenta atrás de un proceso que se inició en el año 2005, que ha pasado por distintas vicisitudes y que en este momento parece encontrarse cercano, en manos de la Unesco, pero que requiere, no sólo de la unidad de los tres ayuntamientos afectados, que existe y sin fisuras, sino del apoyo incondicional de las distintas administraciones, Gobierno de la Nación, Junta de Andalucía y Diputación, que así lo han expresado, pero que ha de materializarse en medios para ayudar a engrandecer y mejorar el entorno y además hacerlo con celeridad porque queda mucho por hacer y la Unesco es muy rigurosa y exigente. A destacar el trabajo realizado por la arquitecta Rufina Fernández, que ha sido prolongación de todo el esfuerzo previo, y que en parte justifica un estado general de optimismo. Sin duda en este momento es importante y decisivo el apoyo ciudadano, que aquellos miles de firmas entusiastas de hace años se traduzca ahora en defensa enérgica de un merecido reconocimiento.