El Ayuntamiento ha debido fraccionar el abono de la nómina de diciembre y la paga extraordinaria de Navidad como consecuencia de sus problemas de liquidez. En concreto, desde la Delegación de Personal se explicó a los representantes de los trabajadores que a lo largo del día de ayer se haría una transferencia lineal a cada empleado de alrededor de 1.400 euros, quedando pendiente un segundo ingreso para los primeros días del mes de enero.
El Consistorio repite por tanto la misma fórmula empleada el año pasado, ya que entonces abonó 1.500 euros por trabajador el 24 de diciembre, abonando el resto del importe que suman la nómina corriente y la paga extraordinaria el 3 de enero.
El pago de la nómina se ha realizado con aparente normalidad durante el resto del ejercicio, si bien algún mes en concreto fue necesario igualmente utilizar la fórmula del fraccionamiento. La propia alcaldesa, María José García-Pelayo, ya admitió hace un par de semanas la imposibilidad de hacer frente al pago de ambas nóminas en una misma fecha, si bien garantizó que los ingresos no se debían demorar en el tiempo.
La Asociación de Técnicos Municipales de Jerez (ATMJ) expresó ayer su inquietud por este hecho, sobre todo por cuanto puede dar lugar a que el Gobierno local utilice como “excusa” esta falta de liquidez para adoptar medidas de ajuste sobre el personal del Ayuntamiento. “Esperamos que esto sea puntual, pero hay que estar pendientes”, señaló Milagros Abascal.
Moción conjunta de la oposición
Los grupos de la oposición defienden hoy en el Pleno municipal una moción conjunta que tiene como principal objetivo garantizar que los trabajadores afectados por el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) promovido por el Consistorio en 2012 sean readmitidos en el supuesto de que la Justicia les otorgue la razón en las demandas individuales que están tramitando. El Gobierno ya advirtió meses atrás su intención de recurrir aquellas sentencias que pudieran ser desfavorables y, en todo caso, elevar las indemnizaciones.
