Una manifestación de agricultores y ganaderos formada por numerosos tractores ha recorrido este jueves un tramo de la A-92 en Antequera (Málaga) para protestar contra los elevados costes de producción que aseguran que les "asfixia" y para reclamar infraestructuras hidráulicas en plena sequía.

ASAJA, COAG, UPA y Cooperativas Agro-alimentarias de Málaga efectuaron un llamamiento a protestar y reclamar que las administraciones tomen conciencia de la gravedad del problema y se pongan en marcha políticas de apoyo a un sector que califican de estratégico en la economía y esencial contribuidor al mantenimiento del medio rural y el espacio natural.

La marcha, que ha partido del núcleo de Los Llanos, ha interrumpido -con el tránsito de los tractores- la circulación en los dos carriles de uno de los sentidos de la A-92 y su destino ha sido la ciudad antequerana.

El presidente de ASAJA Málaga, Baldomero Bellido, ha recordado en la tractorada que hace dos años pedían precios justos y que ahora están "aún peor", con "problemas inasumibles por el campo" y los "ataques que sufre el sector".

Explica que hay un incremento de costes que no pueden repercutir y que se produce en semillas, pienso, abonos, agua, gasóleo o electricidad, cuestión que "agobia la rentabilidad de las explotaciones".

También se ha referido a la competencia desleal con productos que vienen de fuera "con menos control en frontera" y que "mina la rentabilidad", "aranceles que agobian a la aceituna de mesa" y "al veto ruso, que va a durar mucho".

Bellido ha criticado que los precios justos no se puedan aplicar en sectores como la leche o los cítricos y que cuando vienen de fuera, los agricultores tienen que tirar los suyos, por lo que no ve futuro que ofrecer a los jóvenes para que se incorporen a la actividad.

Sobre la reforma de la Política Agraria Común (PAC), dice que "toca el flanco de todos los agricultores andaluces", que es insoportable y que van a perder 500 millones de euros.

De la reforma laboral señala que "está hecha de espaldas al campo" y que les "agobian" con burocracia.

Piden evitar el recorte de ayudas que pretende la PAC, un plan de choque ante los elevados costes de producción que anulan su rentabilidad mientras los precios se derrumban, medidas de control en fronteras ante las importaciones y reciprocidad frente a producciones de terceros países, medidas contra los costes laborales del campo y defender la actividad.