Agentes de la Policía Nacional socorrieron en la madrugada del 3 de enero en un piso en Fuengirola (Málaga) a un septuagenario de origen británico a partir de una notificación de Interpol Manchester. Fueron unos familiares de la persona auxiliada quienes alertaron a la Policía de que no podían contactar con la misma en los últimos días. La notificación instaba a indagar acerca del estado de salud de este ciudadano inglés.
Pese a ser una hora intempestiva --03.00 horas--, los agentes se dirigieron al inmueble, tocaron a la puerta e incluso, al no recibir respuesta, hicieron una rápida consulta entre vecinos y hospitales de la provincia para dar con su paradero. En el transcurso de estas gestiones oyeron una voz muy tenue procedente del interior de la vivienda, apenas entendible, han precisado en un comunicado desde la Policía Nacional.
Finalmente, con el apoyo de Bomberos para franquear la puerta, la dotación policial accedió a la vivienda y localizó a su inquilino tumbado en el suelo del salón, en estado de semiinconsciencia, sin poder moverse, con heridas en cabeza y extremidades, al parecer fruto de una caída accidental.
Tras avisar a una ambulancia, que trasladó a un hospital al septuagenario, este agradeció a sus "compañeros" policías la ayuda prestada, pues, según expuso, el también había sido policía en Reino Unido.