La India registró este lunes 8.488 nuevos casos de coronavirus, el número más bajo desde mayo de 2020, después de que esta nación de más de 1.350 millones de habitantes se convirtiese en el epicentro mundial de la pandemia en mayo pasado con una devastadora segunda ola que causó un colapso sanitario.
Los menos de 8.500 casos confirmados en las últimas 24 horas suponen el número más bajo de los últimos 538 días en el país asiático, anunció el Ministerio de Sanidad indio.
El número total de infecciones por la covid-19 asciende a 34,5 millones desde el inicio de la pandemia, haciendo de la India el segundo país más afectado del mundo en términos absolutos solo por detrás de Estados Unidos, que según la Universidad Johns Hopkins cuenta 47,7 millones de contagios.
La India sumó además 249 fallecimientos por coronavirus, elevando el número total de muertes a 465.911.
Estas cifras contrastan con las vividas durante la segunda ola de la infección, que alcanzó su pico el pasado mayo con más de 400.000 casos y más de 4.500 muertes diarias.
Esta avalancha de casos reconocidos oficialmente, y que según los expertos podría ser en realidad muy superior, provocó el colapso de hospitales y crematorios, así como falta de oxígeno de uso médico en algunas localidades.
Los expertos esperaban el impacto de una tercera ola entre los meses de septiembre y octubre, especialmente debido a la multiplicación de los viajes y encuentros familiares por la época de festividades religiosas.
Sin embargo, por el momento los datos continúan en descenso.
Las autoridades han administrado 1.168 millones de dosis como parte de la campaña de vacunación contra el coronavirus, la gran esperanza del Gobierno para combatir la enfermedad, y el país ha administrado la pauta completa a 401 millones de personas.
Aún así la India está todavía lejos de su meta de inmunizar antes de finales de este año a la mitad de su población adulta con la pauta completa de la vacuna.
