Los terroristas avisaron esta vez con tiempo suficiente de que la Ertzaintza desalojara el edificio objetivo del atentado asi como numerosas viviendas en las próximidades, pero los daños materiales fueron muy cuantiosos.
Las imágenes de la explosión ofrecidas en televisión mostraron como centenares de ventanas del edificio de oficinas revientan en pedazos tras la deflagración.
El atentado se produjo en una zona ubicada junto al campo de fútbol de San Mamés, donde confluyen la estación de Termibús, la de Renfe, la del Metro y la del Tranvía, especialmente concurridas en estas fechas navideñas.
Todas las instalaciones tuvieron que ser desalojadas y la Ertzaintza acordonó la zona en un perímetro de 100 metros.
A las diez de la mañana, los bomberos de Bilbao recibieron una llamada anónima de un comunicante que, en nombre de ETA, les avisó de que habían colocado explosivos ante las instalaciones de EiTB en Bilbao, que estallarían a las once de la mañana. La llamada fue realizada desde un número móvil personal.
Antes de las diez y media de la mañana, los agentes localizaron atada a un árbol a una persona en un monte de la localidad vizcaína de Arrigorriaga, muy cercano a la capital vizcaína.
Ésta había sido asaltada a punta de pistola por los terroristas, que le robaron la furgoneta, una Citroen Jumpy, matriculada en Bilbao, y que fue utilizada para atentar contra EiTB. Antes, los terroristas de ETA habían intentado robar otro coche en Bilbao, sin éxito, ya que éste se dio a la fuga antes de que éstos le retuvieran.
La furgoneta bomba estalló a las 11.05 horas y la explosión provocó numerosos daños materiales, aunque no personales. Tan sólo un trabajador de Antena 3 sufrió molestias en los oídos por la deflagración.
La Ertzaintza había avisado por megafonía a los vecinos para que no salieran de sus casas y bajaran las persianas, con el objetivo de evitar daños mayores.
El atentado del miércoles fue el segundo contabilizado este año contra medios de comunicación. El pasado 8 de junio, una mochila cargada de amonal realizó un boquete de 40 metros cuadrados en los talleres del diario El Correo, en el polígono Torrelarregitia de la localidad vizcaína de Zamudio.
Investigación
La Ertzaintza busca a tres terroristas por el atentado, dos hombres y una mujer que se encargó de aparcar la furgoneta-bomba en la zona posterior del edificio, informaron a Efe fuentes de la lucha antiterrorista.
La mujer colocó la furgoneta-bomba y abandonó a pie el lugar en dirección al barrio de Olabeaga, donde se sospecha que fue recogida por los dos hombres en un Citroen C-2 que había sido sustraída a punta de pistola. Al parecer los terroristas intentaron primero robar otra furgoneta pero fracasaron ya que la conductora, “presa de los nervios, aceleró en lugar de frenar”.
El alcalde de Bilbao, Iñaki Azkuna, recorrió ayer el interior del edificio y se felicitó de que haya “resistido el embate terrorista”. “Por dentro se ve que la estructura del edificio ha aguantado bien”.
Zapatero: “ETA va a perder todas las batallas”
El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, condenó ayer el atentado contra la sede de la Radio Televisión Vasca en Bilbao y afirmó que “ETA podrá atentar, pero va a perder todas las batallas”. “Lo único que van a conseguir los que atentan o los que promueven atentados es que cada vez estén más pronto en la cárcel, que es donde tienen que estar. Ese es el compromiso del Gobierno”, ha dicho Zapatero.
El presidente del Ejecutivo hizo estas declaraciones al inicio del acto de inauguración de la nueva sede de su partido en Sanlúcar de Barrameda, dos horas después de la explosión. Tras expresar su condena al atentado, el presidente del Gobierno expresó su “solidaridad” con los medios de comunicación. “Los medios de comunicación libres son la esencia de la democracia”, afirmó.
Mientras, la secretaria de Estado de Comunicación, Nieves Goicoechea, se puso en contactos con directivos de los centros de EITB y Antena 3 en Bilbao para interesarse por sus trabajadores y animarles a continuar su labor”.