El ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, manifestó ayer que uno de los presuntos etarras detenidos la semana pasada declaró a la Policía que el dirigente de ETA Garikoitz Azpiazu, Txeroki, le confesó que fue él quien asesinó a los guardias civiles Fernando Trapero y Raúl Centeno en Capbreton (Francia).

Así lo explicó el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, al ser preguntado sobre la vinculación del dirigente etarra y las declaraciones prestadas por los presuntos miembros del comando Nafarroa.
Según reveló el ministro, dos de los cuatro miembros del comando Nafarroa, cuya identidad no ha facilitado, declararon a la Policía que mantuvieron un encuentro con Txeroki y que en esa reunión éste les contó cómo sucedió el atentado de Capbreton.

Los dos supuestos etarras declararon que habían oído a Txeroki decir que había participado directamente en el atentado, pero uno de ellos fue más allá y aseguró que el dirigente de ETA reconoció ser el autor de los disparos que acabaron con la vida de los dos agentes.

Rubalcaba ofreció estos detalles sobre el contenido de esas dos declaraciones, cuya veracidad no obstante están comprobando las fuerzas de seguridad. Las dos declaraciones serán remitidas a Francia ya que el sumario sobre el atentado de Capbreton le corresponde a la juez Le Vert.

Fuentes de la investigación indicaron a Efe que los dos presuntos etarras que sitúan a Garikoitz Azpiazu en el atentado de Capbreton son Aurken Sola y Xabier Rey, a quienes el pasado sábado envió a prisión el juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz, junto a los también arrestados Sergio Boada Ezpoz y Araitz Amatria.
En el auto de prisión, el juez Pedraz señala que Sola y Rey se reunieron en Francia con Txeroki, y se alojaron en un inmueble propiedad de una tía de Amatria (compañera sentimental de Xabier Rey). El ministro señaló que las fuerzas de seguridad están analizando el material informático incautado al comando para determinar sus objetivos.
Sobre el atentado contra la Universidad de Navarra, el ministro afirmó que todavía se desconoce el tipo de explosivo utilizado, con lo que aún no se ha podido determinar su cantidad.

También se refirió a las detenciones practicadas por la policía francesa de ocho personas por su presunta vinculación con la izquierda abertzale.

Rubalcaba señaló que las detenciones están relacionadas con las investigaciones que llevan a cabo las fuerzas de seguridad galas sobre algunos actos de violencia callejera en ese país.