El Gobierno de Malí ha presentado su dimisión en pleno y el presidente maliense, Ibrahim Boubacar Keita, ha designado como nuevo primer ministro del país al ministro de Urbanismo Moussa Mara, según ha informado la madrugada de este domingo la Presidencia maliense y la cadena estatal.
"Ibrahim Boubacar Keita, presidente de la República y jefe del Estado ha puesto fin a las funciones de Oumar Tatam Ly, primer ministro y jefe del Gobierno tras la presentación de la dimisión del Gobierno de la República el 5 de abril de 2014", señala un comunicado del secretario general de la Presiencia maliense, Toumani Djimé Diallo, sin precisar las razones de la dimisión.
Después de que Ly haya permanecido apenas siete meses como primer ministro, el presidente Boubacar Keita ha nombrado como su sucesor a Mara, que en septiembre fue designado titular de la cartera de Urbanismo del mismo gabinete. Boubacar Keita le ha encargado la formación de un nuevo Ejecutivo, sin que haya especificado plazo límite alguno.
"Los ministros del Gobierno saliente siguen siendo responsable de sus funciones hasta el establecimiento de un nuevo Gobierno", recuerda la Presidencia de Malí en un comunicado en el que se remite a la Carta Magna.
En virtud del artículo 38 de la Constitución maliense, "el presidente de la República nombra al primer ministro, finalizando sus funciones, previa presentación de la dimisión del Gobierno". En base a las leyes del país africano, la dimisión del Ejecutivo debería ir seguido de la convocatoria de elecciones generales.
Un portavoz maliense ha precisado en la cadena estatal que Ly, un tecnócrata de 50 años, hijo de un prominente escritor y exasesor del gobernador del Banco Central de los Estados de Africa Occidental (BCEAO), había presentado la dimisión en bloque de su Ejecutivo el sábado por la noche.
MARA, RIVAL DE BOUBACAR KEITA EN BAMAKO Y EN LAS PRESIDENCIALES
Mara, de 39 años, casado y con dos hijos, se presentó a las elecciones presidenciales del pasado verano con el partido Yelema (cambio, en bambara), del que es líder y fundó en 2010, bajo el eslógan de 'Enderezar y fortalecer el Estado', con la corrupción política enraizada en los diversos estratos de la Administración en su punto de mira.
Con un postgrado en contabilidad en Francia, Mara dio el salto a la arena política en 2004 en Malí al integrar una lista independiente conformada por jóvenes que abogaban por un cambio en el poder de Bamako, la capital maliense.
Su fulgurante ascenso culminó dos intentos fallidos y tres años más tarde, cuando venció en las urnas al actual presidente de Malí en la segunda ronda de las elecciones de Bamako con el 48,5% de los votos.
Mara apoyó la operación militar que las autoridades malienses lanzaron el pasado año contra el avance islamista en el norte del país, en la región del Azawad, en coordinación con las tropas francesas.
Como resultado de la disolución de la amenaza islamista, Malí enfiló un proceso político para normalizar la situación y con unas elecciones presidenciales en las que los malienses encomendaron a Boubacar Keita unificar a la fragmentada sociedad de Malí.
Sin embargo, el país se ha adentrado en una espiral de caos e inestabilidad política que ha impedido que el Gobierno maliense haya podido lanzar la reconstrucción de la nación tras la guerra contra los grupos vinculados a Al Qaeda y la rebelión tuareg de comienzos de 2012, auspiciada por un golpe de Estado propinado por militares de segundo rango.