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Un hombre enfermo de cáncer mata a su hermana a martillazos

Un hombre cuya identidad no se ha facilitado fue detenido ayer tras matar a su hermana a martillazos en un piso de la calle Vara de Rey de Logroño.

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  • Traslado del cuerpo de la mujer cuyo hermano la mató ayer en Logroño. -
Un hombre cuya identidad no se ha facilitado fue detenido ayer tras matar a su hermana a martillazos en un piso de la calle Vara de Rey de Logroño. 

Los hechos ocurrieron pasadas las siete de la mañana en el domicilio del presunto homicida, un hombre de unos 60 años que sufre cáncer linfático, informó una vecina del inmueble. 

La mujer, de unos 52 años de edad, iba habitualmente a cuidar de su hermano y ayer fue agredida por éste a martillazos, después de una “fuerte discusión entre ambos”. 

Se da la circunstancia de que la fallecida era la persona que había donado la médula a su hermano enfermo de cáncer, a quien venía a cuidar cuando su esposa salía a trabajar para ayudar a la economía del hogar. 

Según informó otro vecino del inmueble, el presunto homicida, de profesión albañil, está casado y tiene tres hijos, mayores de edad que no viven en el domicilio, aunque venían de vez en cuando a visitarlo. 

El matrimonio vive en el quinto piso del inmueble número 48 de la céntrica calle Vara de Rey de Logroño. 

Una vecina que vive en el piso de arriba del presunto homicida ha relatado a Efe que hacia las 07.00 escuchó durante un cuarto de hora a la hermana “gritando como una histérica pidiendo auxilio”. 

En la vivienda, ha añadido esta vecina, también se escuchaban golpes y la voz de fondo de una mujer, aunque ha subrayado que no escuchó más porque coincidió con la hora en la que se iba a trabajar. 

El resto de los vecinos consultados han coincidido en relatar que no escucharon ruido alguno respecto al incidente y que se enteraron de lo ocurrido hacia las 09.00 horas por la presencia de la ambulancia y la Policía. 

También han informado de que el suceso les ha pillado por sorpresa ya que era una familia que nunca había ocasionado problemas al vecindario. 

Uno de los vecinos ha manifestado que podría haber sido “un arrebato de locura, por las dificultades que tenía para vivir, debido a su estado de salud”. 

Los familiares del presunto homicida –mujer, hijos y un hermano– han tenido que recibir apoyo psicológico en la ambulancia aparcada frente al domicilio del matrimonio.

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