Brasil recortará entre 70.000 y 80.000 millones de reales (23.186-26.500 millones de dólares) en gastos como parte de sus medidas de ajuste fiscal, confirmó hoy el ministro de Hacienda, Joaquim Levy.
Levy precisó que el monto exacto del recorte dependerá de la aprobación por parte del Congreso de las medidas de ajuste fiscal propuestas por el Gobierno para equilibrar las cuentas públicas y garantizar el cumplimiento de la meta del superávit primario para este año, fijado en el 1,2 % del PIB.
"No sabemos cuál va a ser el resultado del Congreso. Por eso estamos estudiando diversas opciones", afirmó el ministro tras una reunión con el vicepresidente de Brasil, Michel Temer.
La cifra exacta de recortes se anunciará oficialmente esta semana cuando también se voten en el Senado algunas medidas de ajuste ya aprobadas por la Cámara de los Diputados, entre ellas el proyecto de ley que endurece el acceso al seguro de desempleo.
Con estas propuestas el Gobierno de Brasil pretende reducir el elevado gasto público ya que las cuentas del país registraron en 2014 un déficit primario de 32.536 millones de reales (10.777 millones de dólares), el primer saldo negativo en los últimos 13 años desde que el indicador comenzó a ser medido en 2002 con los actuales criterios.
El Gobierno ha defendido en reiteradas ocasiones que el plan de ajuste fiscal es necesario para reactivar el crecimiento económico, que se encuentra estancado.
La economía brasileña creció un 0,1 % en 2014 y las proyecciones oficiales apuntan a que este año la economía se contraerá en torno al 1 %.