La televisión catarí Al Yazira pidió hoy a las autoridades alemanas que liberen inmediatamente al periodista de la cadena Ahmed Mansur, retenido el sábado en el aeropuerto de Berlín por una orden internacional de detención emitida por Egipto.
"La represión contra los periodistas por parte de las autoridades egipcias es bien conocida (...) Otros países no deben ser herramientas de esa opresión contra los medios y menos aquellos que respetan la libertad de prensa como Alemania", subrayó en una nota el director general de Al Yazira, Mostafa Suag.
Mansur, un veterano y reconocido periodista del canal de Al Yazira en árabe, quedó retenido ayer cuando se disponía a tomar un vuelo de Qatar Airways a Doha, después de entrevistar a un experto alemán.
El propio reportero dijo a la cadena catarí por teléfono que permanecerá bajo custodia hasta el lunes, cuando comparecerá ante un juez alemán, que decidirá sobre su caso.
Según recordó hoy en un comunicado el Ministerio egipcio del Interior, Interpol emitió una orden de arresto a petición de El Cairo contra Mansur, que fue condenado en 2014 por un tribunal egipcio a 15 años de cárcel por secuestrar y torturar a un abogado.
Mansur insistió, sin embargo, en declaraciones a Al Yazira que ese caso es "fabricado" y que la propia Interpol rechazó la solicitud de Egipto de detenerlo.
Este arresto se produce dos semanas después de que el presidente egipcio, Abdelfatah al Sisi, visitara Alemania para reunirse con la canciller Angela Merkel.
Las autoridades egipcias han perseguido y sentenciado a penas de cárcel a numerosos periodistas de Al Yazira, cadena a la que acusan de colaborar con los Hermanos Musulmanes y difundir noticias que dañan la imagen y la seguridad del país.
Un grupo próximo a la cofradía, el llamado Consejo Revolucionario Egipcio, condenó hoy la detención de Mansur por ser una forma de respaldo a las políticas del régimen de Al Sisi contra la libertad de prensa y opinión.
En el texto, este movimiento consideró que el arresto envía "un mensaje negativo sobre la dualidad de valores de los gobiernos occidentales respecto a Egipto".
Al Yazira ha sido vetada en Egipto a causa también de la tensa relación entre Doha y El Cairo, ya que Catar fue uno de los principales valedores del derrocado presidente islamista Mohamed Mursi -de la cofradía- y fue muy crítico con las autoridades que surgieron tras su derrocamiento.
Tres periodistas de Al Yazira fueron detenidos en diciembre de 2013 y sentenciados a penas de entre siete y diez años de prisión, aunque este año el australiano Peter Greste fue deportado y los otros dos puestos en libertad al ordenarse la repetición del juicio.
