La comisaria jefa de la policía británica, Cressida Dick, elevó hoy a siete la cifra de víctimas mortales en los dos ataques terroristas ocurridos anoche en Londres.
La responsable policial confirmó que los tres terroristas sospechosos de llevar a cabo los ataques fueron abatidos en tan solo ocho minutos.
El terrorismo ha vuelto a azotar al Reino Unido, a escasos días de las elecciones generales, con dos ataques registrados este sábado en Londres, en los que seis personas fueron asesinadas y otras treinta resultaron heridas, mientras que tres terroristas fueron abatidos por la policía.
Los trágicos sucesos, perpetrados en el puente de Londres y en el mercado de Borough de la capital, se suman al trauma apenas superado del atentado perpetrado en Mánchester hace dos semanas, que se saldó con 22 muertos y 64 heridos, y dos meses después del ataque contra el puente de Westminster, en Londres, con cinco fallecidos.
Según informó Scotland Yard, el suceso en el puente londinense, muy transitado en una noche en la que acompañaba el buen tiempo, se produjo a las 21.00 GMT cuando un vehículo arrolló a los viandantes para continuar hacia el mercado, repleto de bares y restaurantes.
Una vez allí, los terroristas abandonaron la furgoneta y apuñalaron a las personas que se iban encontrando, incluyendo a un agente de policía, que fue herido de gravedad.
Los agentes armados respondieron a los incidentes "con mucha rapidez y valentía, enfrentándose a tres sospechosos varones, que murieron por disparos en el mercado de Borough", de acuerdo con una nota de las fuerzas de seguridad.
La Policía Metropolitana (Met) indicó además que los sospechosos llevaban "lo que parecían chalecos con explosivos, que luego resultaron ser falsos".
La BBC mostró una imagen en la que se veía a dos hombres tirados en el suelo, supuestamente tras haber sido tiroteados por la policía, uno de ellos con latas adosadas al cuerpo.
Simultáneamente a los ataques, se produjo un tercer incidente violento con arma blanca en el barrio de Vauxhall, en el sur de Londres, pero posteriormente la policía lo desvinculó del terrorismo.
La primera ministra británica, Theresa May, presidirá hoy una reunión del comité de emergencia Cobra para analizar estos hechos, según confirmó Downing Street, y, previsiblemente, la campaña electoral para los comicios del jueves volverá a suspenderse.
May calificó de "terribles" estos actos "terroristas" y dijo que "esta es una investigación muy activa", al tiempo que expresó su "gran agradecimiento a la Policía y a los servicios de emergencia".
"Nuestros pensamientos están con los afectados por estos horribles sucesos", afirmó en una declaración.
También el líder del Partido Laborista británico, Jeremy Corbyn, lamentó los "brutales y estremecedores" siniestros y se solidarizó con las "víctimas y sus familiares" .
El alcalde de Londres, Sadiq Khan, tildó por su parte de "deliberados y cobardes" las agresiones y consideró que "no existe ninguna justificación para tales actos bárbaros".
Los ataques se producen a dos semanas del atentado terrorista ocurrido en Mánchester, en el concierto de la cantante de pop estadounidense Ariana Grande, quien confesó esta noche que estaba "rezando por Londres", en un escueto mensaje en su perfil de Twitter.
Grande se encuentra estos días en Mánchester para participar mañana en un espectáculo benéfico por las víctimas con otros artistas internacionales.
El secretario general del Consejo Musulmán Británico, Harun Khan, mostró su "shock e indignación" en nombre "de todos los musulmanes del mundo" ante esta dramática situación.
A lo largo de la madrugada, testigos relataron que vieron a un hombre con "un cuchillo grande" por el mercado de Borough y a un vehículo atropellando peatones por el puente de Londres.
Uno de las personas que presenció los hechos, Neal Tate, dijo que vio cómo "dos o tres hombres jóvenes veinteañeros eran detenidos en la calle de Borough High Street" cuando iba de camino a su casa.
Otro testigo, Mark, contó cómo vivió el momento en que una furgoneta blanca arremetía contra un grupo de personas que cruzaba el puente londinense.
"Vi cómo lanzaba a una persona metros por el aire y hasta donde pude ver, había unas cinco o seis personas tiradas en el suelo. Parecían muertas o que se estaban muriendo", dijo ese chico.
Alex Shellum, otro hombre que se encontraba en un pub de Londres cercano al puente, relató como vio a una chica de unos veinte años "tambalearse hasta entrar al pub, sangrando muchísimo".
"Nos pareció que le habían rajado la garganta", recordó ese testigo, que agregó que el local entonces se cerró al público y policías armados les pidieron que abandonaran la zona.