El Gobierno yemení reconocido internacionalmente anunció hoy la ruptura de sus relaciones diplomáticas con Catar, y se une así a la decisión tomada por Arabia Saudí, Egipto, Baréin y Emiratos Árabes Unidos (EAU), según la agencia oficial de noticias, Saba.
En un comunicado, el Gobierno, presidido por Abdo Rabu Mansur Hadi, que se encuentra exiliado en Riad, mostró su apoyo a la decisión de la coalición árabe -liderada por Arabia Saudí- de expulsar a Catar de dicha alianza.
"El Gobierno yemení anuncia su apoyo a los pasos tomados por la comandancia de la alianza de apoyo a la legitimidad en el Yemen que pone fin a la participación de las fuerzas cataríes" en el conflicto.
Según Saba, el Gobierno yemení adujo que han quedado "claras" las prácticas de Catar y de su trato de favor con "las milicias golpistas", haciendo referencia a los rebeldes hutíes, que controlan la capital del Yemen, Saná, y de "su apoyo a las organizaciones extremistas" en el país, donde operan el grupo terrorista Estado Islámico (EI) y la organización Al Qaeda.
Por su parte, el presidente del Comité Supremo de la Revolución, perteneciente a los rebeldes hutíes, Mohamed Ali al Huti, aseguró a través de su página en Facebook: "Condenamos las acciones dirigidas contra Catar y estamos listos para cooperar con él".
El responsable recomendó a los países árabes que han adoptado esta postura que "revisen" estas medidas que "aislan a Catar".
Baréin, EAU, Arabia Saudí y Egipto han informado esta madrugada del cierre de sus fronteras y del espacio aéreo y marítimo con Catar y la retirada de su misión diplomática en el reino.
Este anuncio se produce pocas horas después de que los ministros de Asuntos Exteriores egipcio y saudí se reunieran en El Cairo.
La nota asegura que Riad ha tomado esta decisión por las "violaciones graves de las autoridades de Doha, en privado y en público, en los últimos años con el fin de romper la unidad interna saudí, incitar al abandono del estado, poner en peligro su soberanía y la adopción de organizaciones terroristas (...), entre ellas los Hermanos Musulmanes, el Estado Islámico y Al Qaeda".
Además, le acusa de promover el discurso y los planes de estas agrupaciones a través de los medios de información de manera permanente.
El ultraconservador reino acusa también a Doha de respaldar a Irán en su apoyo a los "grupos terroristas" en la provincia de mayoría chií saudí de Qatif, así como en Bareín, además de apoyar a los rebeldes hutíes del Yemen.
El Cairo, por su parte, también acusa al emirato de Catar de "apoyar las operaciones terroristas en el Sinaí (noreste) y de intervenir en los asuntos internos de Egipto y los países de la región de manera que amenaza la seguridad nacional árabe y favorece las diferencias dentro de las sociedades árabes".
Tras el comunicado, la alianza árabe encabezada por Arabia Saudí que combate en el Yemen junto al presidente Abdo Rabu Mansur Hadi ha anunciado la expulsión de Catar de la coalición, según una nota difundida también por la agencia SPA.