El Gobierno de Estados Unidos exigió hoy una auditoría completa del resultado de las "fraudulentas" elecciones regionales del pasado domingo en Venezuela y el establecimiento de un Consejo Nacional Electoral (CNE) independiente.
"Apoyamos una auditoría electoral completa por parte de entidades creíbles e internacionalmente reconocidas, y el establecimiento de un Consejo Nacional Electoral independiente", dijo la portavoz del Departamento de Estado, Heather Nauert, en un comunicado.
Estados Unidos condena, además, la "acción antidemocrática" del Gobierno venezolano al "requerir que los gobernadores recién elegidos" el domingo "se sometan a la ilegítima" Asamblea Nacional Constituyente (ANC), integrada únicamente por chavistas, "para juramentar su cargo", afirmó Nauert.
"Esta maniobra, que llega después de las fraudulentas elecciones del 15 de octubre, es otro ejemplo del autoritarismo del régimen de (el presidente venezolano, Nicolás) Maduro y su desdén por la voluntad del pueblo venezolano", añadió la portavoz.
Los 18 chavistas que resultaron ganadores en la elección de gobernadores que se celebró el domingo juramentaron este miércoles su cargo ante la plenipotenciaria Asamblea Constituyente, mientras que los cinco opositores que también triunfaron se negaron a acudir a ese acto.
Al solicitar una auditoría de los resultados del domingo, Estados Unidos se sumó a una petición que ya hicieron este martes los doce países americanos que forman parte del llamado Grupo de Lima.
Esas naciones -Argentina, Brasil, Canadá, Chile, Colombia, Costa Rica, Guatemala, Honduras, México, Panamá, Paraguay y Perú- solicitaron una "auditoría independiente" de los resultados con el acompañamiento de "observadores internacionales especializados y reconocidos".
El Gobierno de Donald Trump denunció el lunes que esas elecciones no fueron "libres" ni "justas", y citó, entre otros factores, la "falta de observadores independientes y creíbles", los "cambios de último minuto a locales de votación sin notificaciones públicas" y la "manipulación del diseño de las papeletas".
"Mientras el régimen de Maduro siga comportándose como una dictadura autoritaria, trabajaremos con los miembros de la comunidad internacional e impondremos todo el peso del poder económico y diplomático estadounidense a favor del pueblo venezolano en su intento de restaurar la democracia", afirmó Nauert en su comunicado del lunes.