Más de un millón de bebés, niños y adolescentes han sido diagnosticado con coronavirus en Estados Unidos, que ya superó los 11 millones de casos confirmados en todal, según revelaron este lunes en un informe la Academia Estadounidense de Pediatría (AAP, en inglés) y la Asociación de Hospitales de Niños.

Según el informe, que reúne los datos de los departamentos de salud estatales, desde la aparición de la pandemia y hasta el pasado 12 de noviembre, un total de 1.039.464 niños había dado positivo por covid-19.

Y solo en la semana que concluyó el 12 de noviembre, la estadística de contagios entre menores de edad alcanzó los 111.946 nuevos casos, "lo que es sustancialmente mayor que cualquier semana anterior de la pandemia".

"Encuentro este número impactante y trágico. No habíamos visto un virus que se propague tan rápido en nuestras comunidades desde antes de que tuviéramos las vacunas contra el sarampión y la polio", advirtió la presidenta de la AAP, Sally Goza, en un comunicado.

La experta, con más de tres décadas de experiencia, llamó a hacer más para proteger a todos en las comunidades, mientras se espera por una vacuna.

"Necesitamos urgentemente una nueva estrategia nacional para controlar la pandemia y eso debe incluir la implementación de medidas de salud pública de eficacia demostrada, como el uso de mascarillas y el distanciamiento físico", agregó Goza, para quien la pandemia "está cobrando un gran número de víctimas entre los niños, las familias y las comunidades, así como entre los médicos y otros equipos médicos de primera línea".

La nota indicó que un 27 % de los padres informó del empeoramiento de su salud mental, mientras que un 14 % reportó un empeoramiento de la salud mental de sus hijos, según la encuesta nacional sobre "Bienestar de padres y niños durante la pandemia de la covid-19".

Además, agregó el comunicado citando cifras de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, en inglés), las visitas de niños y adolescentes a las emergencias por problemas de salud mental se han incrementado más de un 24 % durante la pandemia.

Estados Unidos acumula 11,1 millones de casos positivos de la enfermedad y 247.019 fallecidos, según el recuento independiente de la Universidad Johns Hopkins.