La Junta de Andalucía, a través de la Consejería de Agricultura y Medio Ambiente, está realizando actuaciones de restauración forestal y mejoras de los accesos en el Parque Periurbano de la Dehesa del Generalife, una zona de esparcimiento natural de más de 480 hectáreas degradada por los incendios ocurridos en los años 2005 y 2007.
Un total de 261 hectáreas pertenecen a la Dehesa del Generalife, propiedad del Patronato de la Alhambra, de las cuales 220 se encuentran consorciadas con la Consejería de Agricultura y Medio Ambiente. Otras 119 hectáreas corresponden al monte de Lancha de Cenes y es propiedad de la Junta de Andalucía y otras 131 hectáreas pertenecen a los montes del Jesús del Valle y son de titularidad privada.
Estos trabajos forestales, que llevan ya dos años de ejecución sobre los cuatro en los que está programados, tienen una inversión de 1,3 millones de euros y están generando empleo con la creación de 6.543 jornales, según informa en una nota el Gobierno andaluz.
La delegada de Agricultura y Medio Ambiente de la Junta en Granada, Sandra García, y la directora del Patronato de la Alhambra y Generalife, María del Mar Villafranca, han visitado este viernes las actuaciones que se están realizando para recuperar su masa forestal. Los trabajos consisten, en una primera parte, en la retirada de madera a desechar y el desbroce y aclareo, masa forestal que está siendo utilizada por una empresa de Moclín para crear biomasa como energía combustible para comercializar con un demanda en el mercado en alza.
Este aclareo y desbroce permitirá mayor seguridad al entorno y también se realizará una segunda parte de reforestación con la plantación de pino carrasco, que permite fijar el suelo para evitar la erosión con su rápido crecimiento y de plantas autóctonas como es el encinar. Las zonas afectadas por los incendios alcanzaron las 94 hectáreas y ya están en un 20 por ciento regeneradas de forma natural.
En esta fase de repoblación se ha reservado un espacio de cuatro hectáreas que están siendo repobladas por asociaciones ecologistas y grupos escolares como actividad de educación ambiental en colaboración con la Delegación de Agricultura y Medio Ambiente que les facilita los plantones, las herramientas y el apoyo de un técnico.
García ha señalado la importancia de este entorno medioambiental para los habitantes de Granada por su cercanía a la ciudad y disfrute y por ello también se ha incluido las mejoras de los accesos como son la vereda del Barranco del Abogado, la continuación del camino del Término, el del Cementerio de San José, el camino de la Perdiz y el de la Estación de Lancha de Cenes.
Por su parte, Villafranca ha destacado la coordinación y el diálogo permanente entre las instituciones para preservar y mantener este parque periurbano de la Dehesa del Generalife al que ha definido por su valores medioambientales, culturales por los restos arqueológicos encontrados, sus antiguas minas y su reconocido valor paisajístico.
El parque periurbano de la Dehesa de Generalife es una figura de protección medioambiental, declarado en 1995 por la Junta de Andalucía, y con ello se pretende dotar de protección a los espacios situados junto a los núcleos urbanos y que son utilizados por la población para su uso recreativo.
Entre los equipamientos de uso público con que cuenta el parque destacan las dos áreas recreativas del Aljibe de la Lluvia y del Llano de la Perdiz, dos lugares de larga tradición para el esparcimiento de la población de Granada.
Cuenta también con el mirador de la Silla del Moro, el carril cicloturístico señalizado de la Acequia del Real y los tres senderos señalizados del Quejigal del Darro, del Barranco de la Silla del Moro y del circuito deportivo en los Llanos de la Perdiz, y desde los cuales se ofrecen magníficas vistas del conjunto de la Alhambra y de los Parques Naturales de Sierra Nevada y de la Sierra de Huétor.