El alcalde de Granada, Luis Salvador, participa este lunes en una reunión de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), de cuya ejecutiva forma parte, ante la que ha planteado al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que el Ejecutivo central aporte financiación directa al municipalismo para sufragar los servicios sociales, cuyo coste se ha visto incrementado por la crisis del coronavirus.
En rueda de prensa telemática, el alcalde (Cs) se ha referido a situaciones como las de Granada, que, con un remanente negativo que ronda los 60 millones de euros y una deuda de unos 300, está, sin embargo, "haciendo los deberes" con una "mejora" de los indicativos económicos que ha sido, ha agregado, "sustancial" en el último año.
A este respecto, ha abogado por desvincular la ayuda económica a los ayuntamientos a su superávit, y ha resaltado que, en estos momentos, están aguantando "a pulmón" la carga asistencial derivada de la crisis, ha señalado Salvador, quien, en presencia del concejal de Derechos Sociales de Granada, José Antonio Huertas, ha anunciado que el Ayuntamiento pondrá en marcha una red solidaria para que empresarios y vecinos puedan hacer donaciones con las que colaborar económicamente con los afectados por la crisis, en la que la ciudad sufrirá una "caída de ingresos", que ha calificado de "absolutamente tremenda", en un contexto de "incremento de gastos".
Ha reconocido que las sanciones derivadas del estado de alarma suponen "un ingreso", si bien hay cuestiones que incrementarán la deuda como las derivadas del transporte público, y ha señalado que se abordará un "estudio global" con base en los informes jurídicos que el Ayuntamiento ha pedido sobre las nuevas modificaciones que se puedan introducir en el cobro de tasas, aunque ha señalado que el del Impuesto de Bienes Inmuebles, que contempla el abono en dos plazos, en principio "no se puede cambiar" respecto de lo aprobado.
