La Unión Sindical Estudiantil ha destacado la posibilidad de que haya alumnos que suspendan asignaturas por situaciones vinculadas a la crisis del coronavirus, bien por dificultades de acceso a las clases, por haber estado enfermo o por cuidar de un familiar, y reclaman a la Universidad de Granada que tenga en cuenta esta coyuntura de forma que las segundas y sucesivas matrículas de este semestre no cuesten más dinero.

Desde el colectivo estudiantil destacan, en declaraciones a Europa Press, que en algunas asignaturas las segundas matrículas llegan a costar casi el doble y las estudiantes que han podido atravesar dificultades por la crisis del coronavirus, tanto personales como académicas, "no deberían ser penalizados".

Los estudiantes también piden que "realmente se lleve a cabo una evaluación continua", dado que hasta el momento sólo existe una recomendación de la Universidad de que se haga, pero depende de cada profesor, y consideran "injusto" llevarlo todo a un último examen sin saber realmente si todos los estudiantes tienen buen acceso a Internet, materiales online y dispositivos electrónicos.

Abogan por ello por que el próximo curso haya "más diálogo" entre profesores y estudiantes, de modo que se adapte los criterios de evaluación a las circunstancias de cada clase para que el proceso de aprendizaje se realice de la mejor forma posible.

Desde la Unión Sindical Estudiantil sostienen que la Universidad de Granada no está preparada en estos momentos para llevar a cabo un modelo de docencia semipresencial, a tenor de los problemas que han presentado las distintas plataformas, y piden que, si el próximo curso empieza de ese modo, se mejoren los sistemas y se haga un estudio de las necesidades de acceso a Internet y ordenadores de los estudiantes para que ninguno tenga problemas en este sentido.