La hermandad de la Vera-Cruz ahonda en su crisis económica y en una de las peores épocas de su larga historia. El miércoles su almacén fue subastado por la Seguridad Social, como ya adelantó este medio el pasado mes de septiembre, y en esa subasta lo perdió.
Pese a que la subasta partía en una valoración de 86.144,45 euros, fue adjudicado a un particular por 11.750 euros más la cargas de 43.848 euros, correspondiente a la hipoteca que la hermandad contrajo con Caja Sur y con la que se pagó la primera fase de la rehabilitación de la capilla, correspondiente al techo y al coro.
La deuda de la hermandad se reduce por tanto en esos 11.750 euros, pero continúa sobrepasando los 150.000 euros.
La subasta del almacén ha supuesto un duro varapalo para la hermandad, por la historia que guardaban sus paredes y sobre todo porque esta deuda de la Escuela Taller Cristo Viejo viene condicionada por la promesa de Fernando López Gil y Carlos García Caballero de la viabilidad de este proyecto y de que la hermandad no tendría que adelantar o pagar un dinero que no tenía. La crisis económica de la administración andaluza, unido a que la hermandad tampoco ha realizado bien el papeleo, ha llevado a una situación muy difícil para la hermandad.