Los ayuntamientos de Écija, Las Cabezas de San Juan y Sanlúcar la Mayor, todos ellos pertenecientes a la provincia de Sevilla, han anunciado la llegada del superávit a sus economías municipales.
De un lado, el concejal responsable de Economía del Consistorio de Écija, Rafael Serrano (PP), ha dado a conocer el resultado de la liquidación del ejercicio económico de 2012. Serrano ha dado cuenta de un "histórico" superávit de 6.514.502 euros respecto al resultado de 2012, lo que constituye una diferencia de unos 13 millones respecto a la liquidación de 2011. No obstante, ha señalado que estos resultados no se traducen en liquidez, porque el Ayuntamiento astigitano tiene pendiente el cobro de unos siete millones de euros adeudados por entidades como la Junta de Andalucía, la Diputación Provincial, Abengoa y Aldesa. El concejal ha atribuido estos resultados a los efectos del plan de pago a proveedores y la racionalización de recursos.
En Las Cabezas de San Juan, el alcalde, Francisco Toajas (PSOE), ha anunciado que la liquidación del presupuesto del ejercicio 2012 arrojan un un superávit que supera los 2,3 millones de euros y un ahorro neto positivo de 272.757 euros. "Esta magnitud determina que el Ayuntamiento consigue hacer frente a todos sus gastos corrientes más la deuda con bancos con sus ingresos corrientes, siendo éste el mejor indicador de una buena gestión presupuestaria", esgrime el primer edil.
En Sanlúcar la Mayor, finalmente, la concejal delegada de Hacienda, Pilar Moreno (Alternativa por Sanlúcar), ha anunciado que los presupuestos del año 2013 han sido presentados con superávit, lo que supone que este año "el Consistorio sanluqueño va a ingresar en sus cuentas 1.270.000 euros más de lo que va a gastar". El Ayuntamiento, no obstante, deberá destinar este superávit a pagar lo que debe a bancos, proveedores, mancomunidades u otros organismos oficiales, así como continuar con el proceso de saneamiento de sus cuentas.
La concejal independiente también ha subrayado que es la primera vez en mucho tiempo que se tiene a principios de año un presupuesto "aprobado, real y útil" y que "ha tenido que ser adaptado a las necesidades que han ido saliendo por lo que se hace flexible". Así, ha recalcado que el Consistorio va a gastar menos de lo que va a ingresar, pero ha descartado un "perjuicio" en el funcionamiento de los servicios municipales durante el año en curso. "Lo que se persigue es una sustancial rebaja del déficit público, paso natural una vez recuperado el remanente de tesorería negativo que venía arrastrando desde hace años y que ha sido la principal meta de esta delegada desde su llegada", dice la edil.
