El Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación sigue desplegando gestiones para que la joven española de origen saharaui Maloma Morales de Matos pueda expresar libremente si quiere regresar a España con su familia adoptiva y su novio o si, por el contrario, desea permanecer con su familia biológica en los campamentos de refugiados saharauis en Tinduf (Argelia).
El jefe de la diplomacia española en funciones, José Manuel García-Margallo, ha declarado a los medios de comunicación que el Gobierno español se mantiene en contacto con las autoridades del Frente Polisario para que Maloma pueda hacer esta declaración en una oficina de Naciones Unidas.
Y es que en las redes sociales se ha distribuido recientemente un vídeo donde Maloma, flanqueada por su hermano y otros familiares, afirma con el rostro serio que no le hace falta nada más que estar con su familia en los campamentos.
El ministro ha indicado que el Gobierno español cree que el deseo de Maloma es regresar a España y ha precisado que el Ministerio no se plantea suspender la ayuda al desarrollo que destina a los refugiados saharauis como medida de presión para resolver el caso de Maloma, que no es el único, pues hay al menos otras dos jóvenes en una situación similar.
Maloma, que tiene 22 años, empezó a visitar España con siete años en el marco de los programas de colaboración entre familias españolas y saharauis. Comenzó a residir de manera permanente con una familia de Mairena del Aljarafe (Sevilla) que, cuando ella cumplió 19 años, inició el proceso de adopción de Maloma a petición de la propia joven.
El pasado diciembre, la joven viajó a los campamentos de refugiados saharauis en Tinduf (Argelia) porque le habían avisado de que su madre había enfermado. Pasada una semana, cuando se disponía a regresar a España, su familia se lo impidió y desde entonces la retienen en los campamentos.
El viernes pasado, Maloma fue trasladada a Rabuni, la capital administrativa de los campamentos, en lo que se interpretó como un movimiento previo a su salida de donde se encuentra retenida, pero esa liberación de frustró.
El cónsul de España en Argel se ha trasladado a Tinduf para asistir a la joven y negociar con la familia que dejen a la joven decidir libremente qué quiere hacer.