Un centenar de mujeres se congregaron la tarde de este lunes en la Plaza de San Francisco con motivo de la celebración del 8-M. La jornada reivindicativa se ha visto marcada por  el Covid. “Estamos algunas que venimos para representar a todas”, afirmaba Ángela Pérez, una de las manifestantes.

 

Los actos del 8-M también han estado envueltos por la polémica política. Por ello, Alba y Neus, estudiantes universitarias, consideran que  el movimiento se ha visto “criminalizado” y que no se ha estado reflexionando sobre sus reivindicaciones. Laura Romero, otra de las manifestantes, ha coincidido afirmando que “nos han querido tapar”.

 

Este lunes fue la primera vez que la septuagenaria Conchi Pérez se manifestaba en el 8-M. Trabajaba limpiando casas y cuidando de sus siete hijos, ahora, viuda tiene una pensión “muy corta”.

 

Los actos en la calle, de carácter simbólico, se completaron con una concentración  frente al Parlamento y un encuentro en la Plaza del Pumarejo, mientras que el grito de protesta tuvo que trasladarse mayoritariamente a las redes sociales.