Agentes de la Policía Nacional han detenido a 54 personas en siete comunidades autónomas implicadas en el uso fraudulento de tarjetas bancarias extranjeras en España para realizar compras en comercios conniventes, un delito informático denominado 'carding'.
Según ha informado la Policía en un comunicado, las detenciones se han producido en el marco de una macrooperación contra las estafas mediante 'carding' en las provincias de Madrid, Barcelona, Alicante, La Coruña, las Palmas de Gran Canaria, Málaga y Palma de Mallorca.
Los miembros de la organización captaban a personas en distintas provincias para que contratasen datáfonos en entidades bancarias con los que después hacían un uso masivo por periodos de tiempo muy cortos hasta que "los quemaban".
Durante la investigación policial se han desmantelado cinco laboratorios donde se manipulaban y falsificaban tarjetas, y han sido
registrados 19 domicilios en varias provincias.
ORGANIZACIÓN INTERNACIONAL ASENTADA EN MADRID
La investigación se inició cuando la Policía tuvo conocimiento de la presencia en la Comunidad de Madrid de miembros de una organización criminal internacional dedicada a la utilización fraudulenta de tarjetas bancarias extranjeras en España. Esta red simulaba operaciones de venta de efectos o prestación de servicios en TPV de empresas sin actividad comercial.
Las primeras pesquisas desarrolladas por los agentes permitieron
detectar que varias mercantiles ficticias o sin ninguna actividad real solicitaban datáfonos en las principales entidades bancarias del país. También se comprobó que desde Estados Unidos, República Dominicana, Colombia y Venezuela, les suministraban tarjetas bancarias
a los dirigentes de la organización para "pasarlas" por los TPV.
Asimismo, los agentes se percataron de que los principales miembros de la trama se encargaban de captar a personas para la contratación de este tipo de terminales, siendo entregados a otros integrantes de la red que, por periodos de tiempo muy cortos, procedían al uso de tarjetas bancarias de forma fraudulenta y de forma masiva. El dinero obtenido era enviado de forma casi inmediata mediante transferencias bancarias consecutivas a diferentes cuentas.
TRÁFICO ILÍCITO DE DATOS
Las falsificaciones y copiado de tarjetas se realizaban mediante el
método conocido como 'carding' o tráfico ilícito y fraudulento de la
información contenida en las tarjetas de crédito. Con estos datos, los
miembros de la organización realizaban transacciones falsas, ya sea
mediante la introducción de forma manual o mediante la lectura de la
banda magnética.
Esta información, obtenida por hackers, se comercializaba y se vendía en varias páginas y foros de Internet, con el objetivo de establecer contactos comerciales en todo el mundo con grupos delincuenciales dedicados a las estafas y falsificación de tarjetas
de crédito.
EMPRESA CON DELEGADOS PROVINCIALES
Los miembros de la organización encargados de captar a las personas para contratar los TPV se desplazaban por toda España e incluso contaban con una red de intermediarios con una doble finalidad: evitar que conocieran realmente para quién estaban trabajando y para descargarse de trabajo y poder ampliar el volumen de negocio. Los establecimientos comerciales detectados con este fraude, estaban a su vez relacionados con actividades del "raspado" o "cadivi", que consiste en la utilización de tarjetas bancarias de países sudamericanos, principalmente Venezuela, para evadir capitales de estos países.
DESMANTELADOS CINCO TALLERES DE FALSIFICACIÓN
Además de la detención de 54 personas y la realización de 19 registros domiciliarios --siete de ellos en Madrid, dos en Barcelona, uno en Málaga, tres en Alicante, uno en Las Palmas, uno en A Coruña y cuatroen Palma de Mallorca--, se han desmantelado cinco talleres de
manipulación y falsificación tarjetas.
Los agentes también han intervenido cinco lectores-grabadores, ordenadores y soporte informático y software necesario para la falsificación de tarjetas, 300 tarjetas de crédito, 40 TPV, 3.000 euros en efectivo, 60.000 pastillas y medicamentos, una pistola simulada y documentación bancaria referente a los establecimientos conniventes.
Asimismo, los investigadores han solicitado el bloqueo de las cuentas bancarias asociadas a los comercios y a los principales investigados, estando a la espera de la estimación del dinero bloqueado.
La investigación, que continúa abierta, se inició en la Comisaría General de Policía Judicial, Unidad Central de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) Central B.D.E.F. Sección Medios de Pago. Se ha llevado a cabo conjuntamente por la Brigada de Blanqueo de Capitales, de la Comisaría General de Policía Judicial, UDEF Central, BPPJ de Madrid, BPPJ-UDEF de la Jefatura Superior de Policía de Cataluña, Delincuencia Económica de Alicante, Delitos Económica y Tecnológica de la Jefatura Superior de Policía de Galicia, Delincuencia Económica de la Jefatura Superior de Policía de Gran Canaria, Delincuencia Económica de la Jefatura Superior de Policía de Baleares, Policía Judicial de la Comisaría de Distrito de Madrid - Usera / Villaverde, Tetuán y Hortaleza y el Grupo I de la Sección de Delitos Económicos y Tecnológicos de la Comisaría Provincial de Málaga.