Convencido de que el Festival Iberoamericano de Huelva ha sabido en los últimos años rejuvenecerse y ganar frescura, su director, Manuel H. Martín, afronta una nueva edición, la 44, en la que esta muestra plantea una esfera distinta, dando protagonismo a un género como la comedia.
Será el viernes 16 de noviembre cuando empiece esta cita, para la que Martín no tiene "ni la varita mágica ni una estructura férrea de gestión", pero en la que, desde 2016 él y su equipo han aportado "modificaciones que son patentes", según ha indicado en una entrevista con Efe.
De esta forma, se ha apostado por la provincia pero, a la vez, concentrando mucho en la ciudad de Huelva; se ha impulsado la participación de los estudiantes, creando contenidos específicos para ellos; se ha logrado un "palpable" acercamiento al público y, para esta nueva edición, "se ha llevado a cabo un cambio de logotipo que evidencia una deriva de presente y futuro diferente", ha señalado.
A todo esto, Manuel H. Martín, suma la que es una de las principales novedades de este año: la Sección de Comedia Iberoamericana con la que se ha pretendido "plantear una esfera un poco diferente y dar protagonismo a un género que en otras muestras no suele tener tanta visibilidad".
Se trata de un ciclo de carácter no competitivo en el que se proyectarán siete títulos de España, México, Chile y República Dominicana, país al que está dedicada esta edición.
El festival mantiene como línea fundamental de su trabajo al público, del que Manuel H. Martín destaca que "hay que buscarlo, porque a pesar del acceso al cine que proporcionan las plataformas, los festivales son más necesarios que nunca al dar la posibilidad a la gente de ver producciones en pantalla grande, algo que parece ser cada vez va a ser más único".
Después están los profesionales, para quienes el Iberoamericano proyecta una serie de encuentros, uno de los cuales tendrá este año como protagonista a la República Dominicana.
Otra línea de gran importancia para este certamen son los estudiantes para quienes "tenemos muchas cosas interesantes, con las que pretendemos fomentar el que no se vea el cine como algo externo sino como algo orgánico y dinámico hecho por personas", ha añadido Martín.
Para ello se ha preparado una programación "muy variada", dando cabida a todo tipo de géneros, como comedia, ciencia ficción, drama o cine de autor, y en el que destaca que nueve de las veinte películas que se exhibirán en la Sección Oficial las han dirigido mujeres.
En cuanto a los premiados de esta edición -Kiti Manver, Premio Ciudad de Huelva e Ingrid García Jonsson y Manolo Solo, Premios Luz-, Martín ha destacado que "vienen de la industria, son personalidades de prestigio y con una trayectoria por detrás bastante amplia", además recalca el hecho de que "por una pura coincidencia se trata de tres personas muy vinculadas con Andalucía".
Un hecho, asegura, que no le preocupa porque considera que "hay bastante talento en Andalucía como para promocionarlo, y esa sí que es una de las líneas del festival: tenemos que cuidar mucho al cine Iberoamericano, que es nuestra seña de identidad, pero también cuidar a la industria y profesionales andaluces".
Manuel H. Martín se siente satisfecho con el trabajo para esta nueva edición, que ha contado con un presupuesto similar a la de 2017 -unos 480.000 euros-, en un año "importante, en el que hay que hablar de continuidad y de estabilidad, porque las administraciones han hecho un esfuerzo para pagar la deuda contraída en las ediciones de 2014 y 2015".
De sus palabras se denota que sigue con la misma ilusión que hace tres años, cuando recaló en el festival, y su deseo ante una nueva edición sigue siendo el mismo: "Que la gente disfrute en las salas, que se emocionen y que se genere debate cinematográfico entorno a un certamen que los onubenses tienen que sentir como suyo".