Carlos Fontana presentaba en la noche de ayer su dimisión irrevocable como entrenador del Xerez Club Deportivo, aduciendo que después del encuentro del pasado domingo se encontró mal, que está preocupado por su salud y que no está en condiciones de seguir al mando del equipo. En una reunión de dos horas con el director deportivo, Vicente Vargas, y miembros de la Asociación Aficionados Xerecistas XCD se le intentó convencer para que siguiese al frente del equipo, pero el técnico, que ha estado dos encuentros en el banquillo, tenía ya la decisión tomada y, ante eso, se le ha admitido su dimisión.
Fontana se ha ido sin cobrar emolumento alguno, ya que ni siquiera ha querido cobrar la parte que le hubiese correspondido por la mensualidad que ha estado con el equipo, ha deseado suerte al club en su andadura por la División de Honor y se ha despedido de todos los que estuvieron reunidos con él y ha dado definitivamente un paso al lado.
Los resultados no han sido la causa de esta sorprendente dimisión del técnico, ya que se sabe que hay margen de mejora y tampoco el tema de los fichajes, ya que era una asunto que estaba en marcha. Indican fuentes próximas al club que no han existido discrepancias, que había una reunión lógica después de un partido y que ahí Fontana sorprendió con su decisión de presentar su dimisión con carácter irrevocable.
Vargas u otro técnico
La decisión de Carlos Ernesto Fontana ha cogido de sorpresa a los miembros del Xerez Club Deportivo, por lo que en la jornada de este miércoles habrá reuniones para determinar cómo se reconduce la situación. La solución de Vicente Vargas es la de la casa, de un hombre que conoce perfectamente la plantilla pero el director deportivo no parece estar por la labor de volver a sentarse en el banquillo; después queda la opción de negociar con otro técnico y, en ese sentido, hay varios nombres que se pueden tocar y con los que habría que hablar.
