El portavoz adjunto de Vox en el Ayuntamiento de Sevilla, Gonzalo García de Polavieja ha celebrado una reunión con una representación vecinal de San Jerónimo, barrio que ha acogido protestas en contra de la instalación en la zona de uno de los dos centros "resilientes" planeados por el Gobierno local del popular José Luis Sanz, principalmente para personas sin hogar, mujeres víctimas de violencia machista y de trata de seres humanos o personas mayores sin alojamiento tras su alta hospitalaria.
Mientras la plataforma vecinal de San Jerónimo contraria a esta iniciativa avisaba meses atrás de que este proyecto de centro "no responde a las necesidades reales del barrio y, en lugar de traer soluciones, agravará los problemas sociales, de convivencia y económicos"; el edil de Vox, cuyo partido ha apoyado el presupuesto del Gobierno local del PP fruto de un acuerdo entre ambas partes; ha corroborado la tesis del alcalde respecto a que no se trata de "un albergue" al uso para personas sin hogar, sino de otro modelo.
Meses atrás, el Gobierno local aseguraba en ese sentido que estos centros no tendrán sus puertas abiertas, sino que serán centros "cerrados, con vigilancia 24 horas" para una asistencia personalizada a "personas derivadas de las unidades de trabajo social, las entidades sociales y servicios de emergencia social", para vivir en estas instalaciones "su último salto a la vida normalizada" gracias a la intervención de especialistas; con un máximo de 25 personas por centro.
Las "Negociaciones"
García de Polavieja, en el transcurso del encuentro con los vecinos, ha asegurado que "el resultado de las negociaciones con el gobierno permitió modificar sustancialmente el proyecto, de tal modo que que el futuro centro asistencial en nada se parece a los servicios que ofrece un albergue, ni incluso a la imagen pública que proyectan".
"Entendemos las inquietudes de los vecinos, que obedecen en gran medida a errores de comunicación cometidos por el Gobierno municipal el pasado mes de septiembre, cuando en poco más de un mes, denominaó a los centros aistenciales hasta con tres nombres distintos. También ha ayudado el papel que está jugando tanto el PSOE como la extrema izquierda, que están aprovechando para enredar, intoxicar y manipular todo lo posible por puro interés partidista y electoral", ha dicho el edil de Vox, que de su lado critica "los comportamientos incívicos de personas que residen o merodean por los alrededores de los centros sociales" de la Macarena.
Mientras el Gobierno local defendía meses atrás respecto a estos nuevos centros que los mismos no tendrían "nada que ver" con los albergues convencionales y que responden a un nuevo modelo; García de Polavieja ha aseverado que "desde un primer momento", Vox dejó "claro al gobierno que no aceptaba la creación de albergues tradicionales en ningún barrio de Sevilla, porque la experiencia ha demostrado que generan serios problemas de convivencia y de seguridad que afectan profundamente a los vecinos".
"Redefinir el proyecto"
"No era aceptable y en esa línea hemos negociado hasta redefinir el proyecto, que no se parece en nada al concepto de centro municipal de acogida", ha señalado.
"Lo que está pactado y firmado con el gobierno es la creación de centros que sólo atenderán a dos tipo de usuarios, como son las víctimas de violencia y explotación sexual y personas mayores de 60 años en situación de convalecencia tras alta hospitalaria que no disponen de recursos o redes familiares que les proporcionen y aseguren los mínimos cuidados en su recuperación. Se trataría por tanto, de estancias temporales y de ese tipo de usuarios, no otros", ha insistido.